La Secretaría de Medidas Penales, reinserción y atención a la víctima del Departamento de Justicia y el Servicio Catalán de Tráfico han hecho una prueba piloto en el Centro Penitenciario Puig de les Basses para que las personas internas puedan aprovechar el tiempo de la pena para formarse en seguridad vial y optar a recuperar el permiso de conducir. De esta forma, desde el primer día en libertad, su actitud al volante tendrá las máximas garantías. Además, disponer del permiso de conducción aumenta las oportunidades de encontrar un trabajo, algo decisivo a la hora de evitar la reincidencia.
En la primera edición del programa han participado 8 personas entre las que había algunas que habían cometido delitos relacionados con el tráfico y otras que habían perdido la totalidad de puntos del permiso. Todos los participantes han superado el curso. Además, ha habido 6 que han tenido que examinarse. El examen se ha realizado en el centro penitenciario, por lo que los internos no han tenido que esperar a la salida de permiso o al término de la condena. Todos han aprobado.
Para llegar hasta aquí, la Dirección General de Asuntos Penitenciarios del Departamento de Justicia ha trabajado en coordinación con el Servicio Catalán de Tráfico y la Dirección General de Tráfico, para que todos los pasos necesarios –el curso, la certificación médica y los exámenes– se hayan podido realizar en el interior de la prisión, con el desplazamiento en cada caso de los profesionales y equipos necesarios. Por su parte, los internos e internas han pagado los gastos del curso así como de los trámites.
El proyecto se ha podido llevar a cabo gracias a la colaboración de la Federación de Autoescuelas de Cataluña para coordinar esta actividad y gestionar la participación de un centro de permiso por puntos en el proyecto.
Para la prueba piloto, los equipos de tratamiento del Centro Penitenciario Puig de les Basses seleccionaron a las personas internas que cumplían los requisitos para poder participar, entre los que hubiera transcurrido el período preceptivo de privación del derecho de conducir para poder examinarse o que se hubiera cumplido la sentencia judicial que afectaba al permiso de conducir. Durante el curso, impartido durante junio, y hasta el momento del examen, han realizado el acompañamiento a los internos para que pudieran estudiar, con el apoyo del material que la autoescuela les proporcionó, y mediante el acceso controlado a los recursos necesarios online.
La Dirección General de Asuntos Penitenciarios tiene previsto extender la experiencia para que puedan tener acceso internos a todas las prisiones de Cataluña.
Los cursos de sensibilización para la recuperación del permiso
En Cataluña, el año pasado se realizaron 801 cursos de reeducación y sensibilización viarias de esta modalidad. El curso de Puig de les Basses lo ha hecho una autoescuela autorizada para realizar esta formación respetando el contenido y estructura de los cursos de este tipo. La diferencia es que se ha desplazado a un centro penitenciario para impartirlo. La formación, dividida en seis sesiones , la han desarrollado un formador de los cursos de sensibilización y reeducación, un psicólogo-formador y una víctima.
Los cursos de sensibilización y reeducación vial tienen dos modalidades. Una es la recuperación parcial de puntos que tiene una duración de 12 horas. La otra, la de recuperación de permiso, con una duración de 24 horas, va dirigida a personas que han perdido la totalidad de puntos o que han sido privadas del derecho de conducir por sentencia judicial.
Más de 800 personas en prisión por delitos de tráfico
Esta experiencia también se ofrecerá a los internos condenados por delitos relacionados con la conducción que cumplan los requisitos. En Cataluña, cerca de 800 personas cumplen pena de prisión por delitos relacionados con la conducción. En el último año, desde junio de 2021 hasta ahora, 620 personas han ingresado por hechos relacionados con la conducción sin carnet, 214 por delitos relacionados con la conducción bajo los efectos de las drogas o el alcohol y 4 que tienen en común la velocidad excesiva.
Cuando la pena de privación del derecho a conducir sea inferior a dos años, los internos realizarán y superarán un curso. En los casos de sentencia con pena superior a 2 años, el permiso pierde la vigencia y, aparte de llevar a cabo de forma satisfactoria el curso, es necesario superar un examen de la Dirección General de Tráfico.
