Palabras que hacen llorar de felicidad. La tarraconense Marina Greco no duda un segundo en definir así su proyecto, Lagrimones. Estudió Publicidad, sector al que se dedica profesionalmente. Pero siempre ha tenido una pasión que no ha dejado de estar presente en su vida: escribir. «A los 16 años, como todo mi entorno sabía lo que me gustaba, que lo hacía bien porque incluso ya había ganado premios con algunos textos, me empezaron a contactar para que escribiese discursos para momentos especiales». Un encargo fue llevando a otro y Greco se dio cuenta de un nexo en común: «todo el mundo sabe escribir, pero no de forma emotiva; eso surge tras un proceso de autoconocimiento intenso».
Durante muchos años, Greco pensó en emprender. «En 2014, tras el fallecimiento de un amigo, me dije que tenía que hacer lo que siempre había querido». Y así, junto a esa pulsión innata por la escritura, nació Lagrimones, una propuesta de textos personalizados «para profesionalizar la forma de expresar las emociones».
Cuenta Greco que «todo nació como un hobby, que fue yendo a más» de forma gradual, lo que le hizo darse cuenta de que «realmente la gente tenía esa necesidad». Con el paso del tiempo profesionalizó la web, creó un logo y la marca y hasta 2017 se dedicó, principalmente, a hacer discursos invitados, también algunos votos, textos de cumpleaños, cartas de amor... y ese año le contactó una chica a la que le habían pedido oficiar una boda. «Yo nunca había hecho un guion de ceremonias, pero lo personalicé de forma poética y quedaron encantados».
A los pocos meses, una pareja le pidió que les casase y así surgió su faceta como maestra de ceremonias, una sinergia que mantuvo, colaborando en muchas ocasiones con la empresa de eventos La puta suegra, hasta que llegó la pandemia. «En 2021 pensé que íbamos a morir de éxito, pero todo se ha recuperado y ahora llevamos un ritmo de ceremonias más relajado». No obstante, esto hizo que volviese a priorizar la parte de textos personalizados.
En la actualidad, Lagrimones ofrece discursos a medida para bodas, guiones para bodas civiles, votos matrimoniales y otros escritos para celebraciones específicas, con unos precios que rondan entre los 50 euros y los 200 euros, en función del texto que se precise, todos escritos exclusivamente por Greco. Especifica que lo recomendable es trabajar con un par de meses de antelación: «una vez nos contactan, enviamos un cuestionario que ellos cumplimentan. Si queda alguna cosa que no está clara, hablamos, porque es un trabajo muy personalizado e individual que provoca una relación muy de tú a tú». El texto puede ser sorpresa o puede haber dos rondas de cambios para ajustarse a lo que buscan los clientes.
A lo largo de estos diez años, Greco calcula que habrá escrito «entre 300 y 400 textos, ninguno igual a otro». Recientemente ha sido mamá y sigue compaginando su trabajo a jornada completa con Lagrimones. Aunque podría dedicarse en exclusivSa a su proyecto, afirma que le da «un poco de vértigo, porque no encontrarás un texto que se parezca a otro, cada uno es único... Profundizamos en los sentimientos humanos y magnificamos historias llenas de cotidianidad. Lagrimones es un atelier de las palabras. Así que si empezase a hacerlo como hamburguesas, perdería un poco el sentido».
