En la carrera por la igualdad y la visibilidad del deporte femenino hay todavía muchos kilométros por recorrer. De vez en cuando hay un esprint que acorta la distancia, pero no es una carrera de velocidad sino de larga distancia. Cada deporte es un mundo y mientras que en algunos ya reina la igualdad entre hombres y mujeres, en otros todavía existe un desequilibrio que es muy patente.
Abril Rius, nadadora del CN Tàrraco: «Mediáticamente se le da la misma importancia a la natación masculina que a la femenina»
La pista de atletismo Natalia Rodríguez de l’Anella de Campclar es el lugar elegido por el Diari para reunir a cuatro destacadas deportistas de la provincia. Cuatro mujeres que practican deporte de primer nivel. Lo hace con motivo del 8-M, el día internacional de la mujer. Un día para reivindicar la igualdad de oportunidades y derechos de la mujer en una sociedad que todavía debe mejorar mucho en este aspecto. Tener las voces de cuatro deportistas que han convivido en el ámbito del deporte desde el hecho de ser mujer es la mejor manera de poder visibilizar las diferencias en diferentes aspectos que aún existen en 2023. No en todos los deportes, por eso es necesario explicar también aquellas disciplinas en las que ya se ha llegado a la meta de la igualdad. Son un ejemplo en el que otros deportes deben fijarse.
Laura Pascual, jugadora del TGN Bàsquet: «En el baloncesto queda todavía mucho camino por recorrer»
En la primera casilla de salida de la pista está Laura Pascual, jugadora del TGN Bàsquet. La tarraconense cree que el baloncesto es un deporte en el que todavía no existe la igualdad, aunque es cierto que se han dado pasos de gigante en los últimos años: «Queda mucho camino todavía por recorrer, pero es verdad que en el baloncesto femenino hay mayor visibilidad de la que tenía antes, aunque todavía hay muchas diferencias a nivel mediático y a nivel salarial».
Laura Pascual ha tenido que convivir y convive con un deporte en el que la categoría masculina tiene mayor visibilidad y existe una clara brecha salarial. Lo peor de todo es que ha tenido que escuchar una serie de comentarios en el baloncesto escolar que hay que eliminar de una vez por todas. Ese es su deseo: «De pequeña sí que he oído comentarios discriminatorios hacia la figura femenina. Yo cuando jugaba de pequeña en el cole con niños he escuchado comentarios del tipo: -«No dejes que te quite la pelota una niña o no dejes que meta una canasta una niña»-. Juego para que estos comentarios desaparezcan».
Saray Lucha, jugadora del Riudoms: «El fútbol femenino ha dado muchos pasos hacia delante»
Por eso ser un referente del primer equipo del TGN Bàsquet es una herramienta para que las niñas que sueñan con llegar a él tengan un referente. Un hecho que es clave: «Como mujer es una oportunidad de abrir una puerta a las niñas pequeñas del club. Que vean que puedes llegar a un nivel alto siendo mujer o siendo hombre».
En la segunda casilla de salida está Saray Lucha, jugadora del Riudoms. El fútbol femenino es un deporte que últimamente está avanzando mucho hacia el camino de la igualdad, pero que curiosamente quizás es el que tiene un mayor camino por recorrer. Las brechas salariales son gigantes y a nivel de visibilidad todavía hay mucho por hacer. Lucha está viviendo en primera persona el gran cambio que está habiendo en el fútbol nacional, europeo y en consecuencia provincial: «Ha habido grandes pasos hacia delante. Se ha avanzado muchísimo sobre todo con la profesionalidad de la Primera División. Aquí en Tarragona se ha avanzado mucho y ha cambiado el panorama de manera radical».
Mireia López, atleta del CA Tarragona: «El atletismo es un deporte equitativo»
Con la jugadora se añade un extra y es que el hecho de ser madre le ha permitido contemplar el deporte desde un punto de vista clave tanto a nivel físico como de compatibilidad con el día a día: «No hay mucho apoyo en este sentido. Si no fuera por la familia no podría haber seguido jugando tras ser madre».
En la tercera casilla de salida está Mireia López, atleta del CA Tarragona y una de las deportistas con mayor proyección de la provincia. Ella vive en un deporte que es ejemplo de cómo tratar con igualdad tanto la categoría femenina como la masculina. Así lo expresa con orgullo: «El atletismo es un deporte equitativo porque las competiciones se hacen el mismo día y en el mismo momento y en el mismo lugar y el espectáculo se puede ver a la vez. Es algo que me gusta y que en otros deportes no es así».
López critica también que desde un punto de vista externo que hay otros deportes en los que la igualdad es evidente que no existe. A nivel salarial es donde más brecha contempla, aunque lanza una reflexión para ello: «Hay otros deportes en los que la brecha salarial es evidente, pero también es lógico en cierta parte porque generan más. Es verdad que se están abriendo su espacio en otros deportes como el fútbol o el baloncesto y se está apoyando cada vez al deporte femenino en general gracias a ello».
En la última casilla de salida está Abril Rius. La nadadora del CN Tàrraco es una de las promesas de la natación catalana. Ella considera que en su deporte, al igual que el atletismo, está presente la tan deseada igualdad que en otros deportes todavía no hay: «La natación es un deporte muy igualitario. Las pruebas se hacen el mismo día, a la misma hora y en el mismo lugar. Mediáticamente también se le da la misma importancia a la natación masculina y la natación femenina».
Para ella, en este sentido, ha sido clave tener grandes referentes como Mireia Belmonte: «Si preguntan a cualquier persona en este país te dirá antes quizás el nombre de Mireia que el de un hombre, y eso es un claro ejemplo de que ha hecho las cosas bien; estoy convencida que si un hombre hubiera conseguido sus éxitos se le hubiese dado la misma repercusión».
Es una realidad que el mundo del deporte cada vez está dando mayor visibilidad e igualdad al deporte femenino, pero todavía hay disciplinas que tienen muchas asignaturas pendientes para generalizar que el deporte es un ámbito igualitario en todos los sentidos. La natación y el atletismo son el ejemplo de cómo se debe tratar por igual el deporte femenino y masculino. El fútbol y el baloncesto no están a esa altura, pero cada año que pasa andan más cerca de ser justos en el trato sin importar el sexo. Lo que está claro es que ejemplos como el de estas cuatro deportistas evidencian que las cosas se están haciendo bien, pero que todavía se pueden hacer mejor. El día que esto no sea noticia, se habrá conseguido la igualdad en el deporte. Mientras, tocará seguir trabajando en ello.