Es un álbum ilustrado basado en una persona real que luchó por sus ideales en una época en la que las mujeres no lo tenían nada fácil
Luisa vive en Puerto Rico, a finales del siglo XIX. Sus padres le enseñan a leer, abriéndole un mundo de infinitas posibilidades que en el colegio no contemplan, pues allí las niñas únicamente reciben lecciones de costura y de otras tareas dirigidas exclusivamente al cuidado del hogar. A ella no le gusta que nadie le diga lo que debe ser de mayor, ella quiere poder elegir.
Un día Luisa participa en una carrera con un niño y este le gana porque ella tropieza con la falda que en esa época todas las mujeres están obligadas a vestir. Ese es el primer día que echa mano de unos pantalones viejos de su padre (la primera mujer en hacerlo en todo el país), y descubre que son la prenda más cómoda e higiénica del mundo. A partir de ese momento, no vuelve a ponerse una falda, por mucho que los demás la critican por vestir como un hombre. Llegan incluso a detenerla, pero cuando el juez oye su argumentación, la deja en libertad, y eso es lo que Luisa representa y reclama desde entonces: la libertad de las mujeres (y de las personas, en general) a decidir qué vestir, y qué ser.
Este álbum ilustrado es inspirador. Todo un canto de amor a los libros y a la libertad que siembran
La reconocida escritora Susanna Isern escribe Los pantalones de Luisa, un álbum ilustrado basado en una persona real que luchó por sus ideales en una época en la que las mujeres no lo tenían nada fácil. «Era inquieta, y curiosa y le encantaba aprender. De pequeña, su padre la ayudaba con la lectura, y su madre, de origen francés, le enseñó su idioma».
El retrato que la autora hace de la protagonista podría ser el de cualquier niña de cualquier lugar, despierta, con ganas de aprender, de no contentarse con los límites que otros pretenden, límites que ella sabe solo existen porque alguien ha tenido la necesidad de crearlos e imponerlos.
Título del libro: Los pantalones de Luisa
Autora: Susanna Isern
Ilustrador: Esther Gili
Editorial: NubeOcho
Precio: 15.90 €
Pero... si ella siente la necesidad de eliminarlos, también puede lograrlo, ¿verdad? ¡Pues claro que sí! Luisa sabe todo esto y mucho más gracias a su pasión por la lectura, por esos libros que su padre le trae y que ella devora, porque con ellos «Su cabeza se abría a nuevos mundos y diferentes formas de pensar».
Cuando crece busca difundir esta misma pasión entre los que no tienen las mismas oportunidades que ella, leyendo para mujeres analfabetas en las fábricas de su pueblo. Así, el texto es también un canto de amor a los libros, porque es gracias a ellos que Luisa descubre lo que hay más allá de esa escuela que solo pretende crear «buenas esposas, madres y amas de casa». Y como ellos son la mejor herramienta que ella conoce para defender la libertad (tan bien representada por esas aves que vuelan a su alrededor, acompañándola, cuando corre), acaba convirtiéndose en escritora también, para expandir esos ideales a través de sus ensayos, abriendo el mundo a un montón de mujeres de diferentes nacionalidades y condición.
Las coloridas ilustraciones de Esther Gili completan el carácter de Luisa, dotándola de gran personalidad: una muchacha fuerte, segura de sí misma, luchadora, pero también bondadosa... Todo eso se lee en las expresiones que la protagonista adopta, llenas de luz. Me encanta cómo Esther plantea su crecimiento desde la niña que es al inicio de la historia hasta la mujer en la que se convierte, la que se enfrenta a la policía y al juez, y siempre vestida con ese atuendo que le proporciona la libertad que defiende, con un libro debajo del brazo.
El resultado es un álbum súper inspirador, pensado para que lo lean los más peques y también los más grandes, para que sepan que si quieren, pueden. De esta manera, la lucha de Luisa llegará a muchos rincones y no se olvidará nunca.
