La voz de Gabriel de la Rosa da sentido a un proyecto que vive el momento más dulce desde que arrancó. Shinova es hoy una de las grandes realidades del rock nacional y este viernes luce como cabeza de cartel de la primera edición del Reus Music Festival.
Han roto moldes con ‘El presente’, su último disco. Shinova ha pisado los escenarios más importantes del país en 2024 y hay gira hasta 2025.
No te niego que estamos muy felices. Me acuerdo que sacamos el disco y al día siguiente ya tocábamos en la Sala París 15 de Málaga. La gente cantaba las nuevas canciones de memoria. Fue un reflejo de todo lo que nos está pasando este año.
¿Es cierto que, después de una gira, cuando llegas a casa, hay cierta sensación de vacío?
A mí me ayuda a ver la realidad de la vida, porque cuando estás de gira todo son aplausos y halagos. Entre focos y humo se te puede ir la olla, pero por suerte nosotros tenemos gente que nos ayuda a seguir en la tierra. En casa, con una rutina más normal, ves las cosas de una manera natural y con perspectiva.
No sé si está de acuerdo, pero más allá de si te gusta o no, Shinova ha logrado tener una personalidad propia, un sonido que distingue a la banda.
Por lo menos lo hemos intentado, en eso, nuestro productor, Manuel Colmenero, se ha convertido en una persona crucial. Desde el principio tenía las cosas muy claras, sabía perfectamente hacia dónde ir. Nos hemos entendido muy bien.
Vivimos en una sociedad en la que hacemos planes constantemente, pero nos fijamos poco en el ahora. ¿De eso va ‘El presente’?
Nosotros también éramos un poco así y nos dimos cuenta de que, como banda, teníamos que cambiar cosas, disfrutar más del proceso. Lo hemos conseguido y ahora somos afortunados porque valoramos mucho todo lo que está pasando.
El tiempo es de las pocas cosas que no se pueden comprar, ¿verdad?
Sin ninguna duda, no hay nada más importante que el tiempo. El dinero lo es porque te permite hacer cosas, pero si no tienes tiempo para disfrutarlas, ¿de qué sirve?. «No importan los quilates de tu reloj si no es capaz de devolverte el tiempo que se te escapó», dice una de nuestras letras. Lo creo firmemente.
Se ha criado en Bérriz, ¿a quién admiró del movimiento musical vasco?
Nací en Tenerife, pero es verdad que de muy pequeño me instalé en Bérriz. Había un movimiento que no era muy conocido, pero en el que había y hay un talento extraordinario. Me gustan mucho los Seiurte y, nuestros compañeros de oficina, Soziedad Alkoholika.
Usted tiene un pasado heavy.
Totalmente, el metal es un registro musical muy rico que me ha dado aprendizaje y conocimiento. En todo caso, intento escuchar todo tipo de música, hasta el punto que Celia Cruz, por ejemplo, es una de mis artistas favoritas y no tiene nada que ver con lo que yo hago.
A usted le gusta estar en contacto con la gente. Se le ve a menudo intercambiar opiniones con el público en los festivales.
A según qué sitios no puedo ir, pero sí intento escuchar a los que se me acercan. Saber qué canciones les han emocionado, qué sienten con nuestra música. Creo que es lo más bonito de esta profesión y, nunca puedo olvidarme, de que lo que somos se lo debemos al público que compra entradas y viene a nuestros conciertos.
Seguramente es la primera vez que toca en Reus.
Sí y creo que va a ser algo inolvidable. Siempre que vamos a Catalunya, el público nos trata con un cariño especial y tenemos mucha ilusión y entusiasmo por tocar allí. A nivel personal voy mucho a Catalunya porque mi pareja es de allí y me siento muy a gusto en ese lugar.