“Corazón, vuélvete flor; lamento, huye con el viento”, “Escucha, no se puede oír, alcánzalo, no puedes atraparlo”, “Pequeño camino, llévame lejos, deja que me guíe el sol y su reflejo”. En torno a versos de estructura semejante a la estructura tradicional del haiku, el artista argentino Lui Mort construye un mundo de belleza insólita, poesía visual cuya aparente ligereza esconde, como los poemas de Matsuo Bashō, Masaoka Shiki o Issa Kobayashi, un espacio de detención. A través de formas visuales que se despliegan en un campo de posibilidades que va del fauvismo a influencias tan diferentes como Maurice Sendak o Liniers, Mort construye un espacio poético único, en una melodía que se construye página a página pero que, como la obra de los grandes aforistas, de Pascal a Lichtenberg y de La Bruyère a Canetti, requiere de una sabia dosificación.
La exquisita edición de La Granja Editorial hace de Pequeño Camino un objeto de una belleza inaudita, del que hacerse acompañar en todo momento frente a los embates de la realidad. En una época marcada por la recurrencia de una iconografía cotidiana del genocidio, la guerra, la violencia sistémica y la vulneración de los derechos del individuo, a menudo amplificada por el eco de un sinfín de pantallas omnipresentes, cada una de las páginas de esta obra prístina, bellísima e indispensable puede constituir un asidero, una pausa capaz de justificar, como quería Heidegger, la necesidad de poetas en tiempos de penuria. “El mundo real es mucho más pequeño que el imaginario”; “En la corriente del río, mi casa. En la voz de los fantasmas, mi abrigo”.
Pequeño camino.
Autor: Lui Mort
Editorial: La Granja Editorial