Vila-seca comenzará próximamente la adecuación del entorno del Celler, un espacio que compró hace nueve meses a la Cooperativa Agrícola y que debe servir para culminar la transformación de esta zona del municipio. De momento, el Ayuntamiento ha aprobado una modificación de crédito de 100.000 euros que se destinarán a adecuar una de las antiguas naves agrícolas que se encuentran junto al nuevo equipamiento cultural. En este caso, la remodelación debe servir para dotar de un espacio para sus actividades a los Xiquets de Vila-seca.
«La colla necesita un sitio propio donde expresarse y donde poder realizar sus actividades. No solo ensayar, también debe servir para dar más vida social. Es algo muy positivo y un paso importante», celebra el presidente de la entidad, Héctor Soler. La colla, que ha cerrado la temporada castellera recuperando parte de la masa social que se perdió durante la pandemia, suma actualmente una sesentena de miembros activos. Estos últimos meses han estado ensayando en diferentes espacios cedidos como el Ateneu Pi i Margall, El Fènix, alguna escuela o en la misma calle. «Disponer de un local propio nos ayudará a atraer más gente y a mantenerlos. Históricamente ha sido así con todas las colles de nuestro entorno, que han vivido un momento de consolidación por el hecho de disponer de un local propio. Nos dará un caliu y una nueva vida a la colla», expresa Soler.
En concreto, el espacio que se remodelará es el antiguo almacén para las olivas de la Cooperativa, que estuvo operativo hasta la campaña del año pasado y que anteriormente albergaba también el molino y los depósitos para el aceite. Ahora, los servicios técnicos municipales trabajan en la redacción de una memoria valorada que definirá las obras para adaptar el almacén como espacio de ensayo de los Xiquets. Básicamente, la actuación deberá servir para adecuar los pavimentos y la ventilación del edificio. Además de la nave principal, con unos 260 metros cuadrados de superficie y una altura suficiente para ensayar las construcciones castelleras, el espacio cuenta con una pequeña edificación anexa que está comunicada interiormente y que también acogerá otras actividades de la entidad. La previsión es que el local pueda estar a disposición de los Xiquets de Vila-seca a finales de primavera.
«Hace tiempo que estamos trabajando de la mano de la colla para encontrar un sitio apropiado para que puedan desarrollar sus ensayos. Buscábamos que fuera una ubicación céntrica y, además, cuenta también con un espacio exterior que servirá para que los Xiquets puedan organizar actos», cuenta la concejala de Cultura de Vila-seca, Manuela Moya.
Asimismo, la regidora detalla que ésta es una solución temporal, ya que esta área anexa a la antigua sede de la Cooperativa está concebida para incorporarse en un futuro al polo cultural que conforman el Celler y el Castell. «Es una cesión temporal, con una temporalidad larga. En la ciudad tenemos muchos proyectos en marcha y muy potentes, pero se debe buscar el equilibrio mientras encontramos una solución definitiva. Además, damos uso a este espacio que ya tenemos», explica Moya.
La compra a la Cooperativa
El Ayuntamiento adquirió este espacio a la Cooperativa Agrícola el pasado mes de febrero por un importe de 560.000 euros. A parte del almacén que se adecuará para los Xiquets, la finca cuenta con 3.146 metros cuadrados de superficie, que incluyen otras dos edificaciones que albergaban usos agrícolas, además de espacios exteriores que quedan integradas dentro del entorno del Celler.
Junto a esta parcela, el consistorio compró también las instalaciones de la Cooperativa de la calle Sant Antoni, que incluyen la Agrobotiga, la zona de oficinas y el almacén, en un espacio que colinda con las calles de La Font y Riera. En este caso, el Ayuntamiento pagó 690.000 euros y podrá hacer uso del espacio una vez la Cooperativa Agrícola traslade su actividad al polígono Alba, donde ya está ultimando las obras de su nueva sede. Por el momento, no se han definido los usos que tendrá este céntrico espacio que, eso sí, se convertirá en un nuevo equipamiento público.
Instalarán lavabos públicos en el paseo de La Pineda
La modificación de crédito aprobada en la última sesión plenaria sirvió también para incorporar una partida de 255.000 euros que se destinarán a la adquisición e instalación de seis lavabos adaptados que se ubicarán en el paseo marítimo de La Pineda. En concreto se instalarán cinco lavabos a lo largo de la playa que irán junto a zonas de duchas y pasarelas actuales y otro más en el entorno del Pinar de Perruquet, junto al nuevo módulo de socorrismo que se habilitará. Estos trabajos, que se incluyen dentro del Pla de Millora del Passeig Marítim, engloban también las obras de canalización para los nuevos lavabos. La previsión es que puedan estar operativos de cara a la próxima temporada turística.