«Las sensaciones después de las fiestas de Navidad de Vila-seca son inmejorables».
Así de contundente se mostró Pere Segura, alcalde de Vila-seca, en el transcurso de una larga conversación con el Diari de Tarragona para hacer balance de cómo se han desarrollado las fiestas de Navidad, fin de año y Reyes, y justo a las puertas de arrancar la festividad de Sant Antoni que, a partir del próximo martes, volverá a llenar las calles de conciertos, diables, humor, fiestas infantiles y sobre todo, de tradición con Els Tres Tombs o El Cós de Sant Antoni en el circuito hípico del Parc de la Torre d’en Dolça.
Consolidación del modelo
Entre otras cuestiones, Segura destacó que cada vez hay más afluencia de visitantes en las actividades organizadas, hecho que genera «una enorme satisfacción y orgullo» entre el equipo de profesionales que se pasan meses trabajando en las cerca de 70 actividades programadas en esta pasada edición. Ejemplo de ello es el pesebre de arena de La Pineda, que este año recibió cerca de 30.000 visitantes y con el paso de los años se ha convertido en todo un clásico en las Navidades en la Costa Daurada y en un «formato único y singular».
Vila-seca es un municipio donde los vecinos han pasado de ir a ver los actos más importantes que marcan la agenda del año a las localidades del alrededor, a quedarse en la propia localidad, vivirlo de cerca y muchos de ellos, querer organizarlos y trabajar para mantener y preservar la tradición.
Segura dijo que todo ello forma parte de un proyecto de ciudad que se ha ido desarrollando y consolidando con el paso de los años. «Es muy importante que haya alma, latido y que sucedan cosas cada fin de semana en el Celler, Castell o en Auditori y esto, lo hemos conseguido. Antes no existía, no lo teníamos en propiedad por lo que hemos tenido que construirlo», afirmó Segura.
El alcalde concluyó asegurando también que, una parte del éxito del cambio que ha experimentado Vila-seca, es que todas las actividades programadas en cultura, ocio, entretenimiento o gastronomía han ido acompañadas de una transformación para hacer una ciudad «más amable, saludable, cercana, cohesionada y con la mirada puesta a los niños», sobre todo en Navidad.
Sant Antoni, en unos días
Después de Navidad, Vila-seca ya tiene la mirada puesta en una de las fiestas más importantes de la localidad donde la tradición marcará la agenda de los próximos días. Entre los actos más destacados resalta Els Tres Tombs -el día 17E- o el Cós de Sant Antoni el próximo 21E.