Más de 2.000 personas despiden el año con el tradicional baño de San Silvestre en La Pineda

¿Te imaginas una playa con cerca de 2.000 personas a las 12:00 del mediodía con disfraces, muchas ganas de pasarlo bien y empezar ya la celebración del 2025? Tal y como ha sucedido en tantos otros puntos del país, es la escena que se ha vivido en la playa de la Pineda -en Vila-seca- hoy martes en la 29a edición del baño de San Silvestre que ha vuelto a ser un «éxito de participación» teniendo en cuenta que es un día laborable para muchas personas.

Como ya es toda una tradición en la localidad, centenares de asistentes han hecho «un bañito rápido con disfraces, gorros de Papá Noel y en general, muchas ganas de pasarlo bien y de divertise».

Un año más, a las 12:00 horas han sonado las 12 campanadas con sus tradicionales uvas para justo después, los más de 2.000 asistentes entrar en el agua, refrescarse, «dejar atrás» todo el 2024 y empezar a disfrutar de una jornada que será larga con actividades infantiles durante la tarde y la fiesta para dar la bienvenida al 2025 en localidad y en el resto de municipios de la Costa Daurada.

Mientras que los más atrevidos se han bañado como un día de verano más, otros apenas se han mojado los pies y muchos más lo visto e inmortalizado desde la orilla de la playa.

Sea como fuere, un mar tranquilo y un sol radiante durante toda la mañana han sido los cómplices perfectos a la alta participación de este año que ya sea con amigos, familia o compañeros de trabajo muchos vecinos de la localidad no se han querido perder la oportunidad de darse el último baño del 2024.

Entre los asistentes un grupo de compañeros de trabajo de Vila-seca que han explicado que vienen cada año «para empezar a disfrutar de la noche del 31 de diciembre, pero desde el mediodía. El agua estaba fría, pero siempre vale la pena bañarse», han asegurado».

Justo después del baño, la organización ha servido un taza de caldo o bien chocolate y han brindado con una copa de cava para celebrar la llegada del 2025.

La actividad en Vila-seca seguirá por la tarde con actividades infantiles con los gegants y el Home del Nassos. Después de las campanadas empezará la noche de diversión en el Pavelló Municipal d’Esports hasta altas horas de la madrugada.

Sebi Olmedo, miembro de la Junta de l’Associació de Veïns de la Pineda, ha explicado que se ha convertido en una «tradición preciosa» y cada año premian con un pequeño objeto al mejor disfraz. Según Olmedo, el objetivo más importante «es que la gente se lo pase bien y disfrute de los últimos compases del 2024 para empezar a vivir y disfrutar del 2025».

Otra de las personas que no se ha perdido esta cita con el mar el 31 de diciembre es el alcalde de la Vila-seca, Pere Segura, que ha explicado que lo que empezó siendo una cosa muy menor ha crecido, se ha consolidado año tras año y ya es toda una tradición entre los vecinos de Vila-seca, la Pineda o turistas que disfrutan de uno días de vacaciones en la zona.

«El sol nos ha ayudado mucho pero el agua estaba muy fría, doy de ello», ha detallado el alcalde con una sonrisa mientras explicaba que las actividades organizadas en momentos festivos siempre tiene el foco en pasarlo bien, compartir, familias, amigos y sobre todo, «que impere la alegría y las ganas de disfrutar».

Segura ha dicho que el momento más importante de este momento de las fiestas se vivirá con la cabalgata de los Reyes Magos el próximo día 5 de enero y justo después, la localidad ya se sumerge en las fiestas de Sant Antoni que son otro de los momentos más especiales de Vila-seca por su vinculación con el mundo de los caballos y todas las actividades que se organizan con motivo de esta festividad.

«Sant Antoni es unas de las fiestas más simbólicas para la localidad y llegan justo después de las de Navidad por lo que apenas terminas una festividad y arrancas el año con otra igual de importante. Es una maratón».

Preguntado por un deseo de cara próximo año, Segura ha augurado los mejores momentos para todos los vecinos y mucha prosperidad.

2025, ¡haz magia!