Las obras para finalizar la construcción de un puente sobre la desembocadura de la riera de La Bisbal, en Sant Salvador de El Vendrell, están paradas por la presencia de un ave en peligro de extinción que ahora está en el periodo de nidificación y cría.
Esta semana Ministerio de Medio Ambiente, Generalitat y Ayuntamiento acordaron parar los trabajos hasta que finalizase la cría del chorlitejo patinegro (corriol camanegre) para no perturbar a la nidificación.
Pero de nada puede haber servido la medida ya que la fiesta celebrada durante la noche de Sant Joan en la zona protegida de Les Madrigueres y la desembocadura de la riera dejó todo lleno de basura, se destrozó el balizamiento que evita el acceso a la zona de protección y algunos entraron en el área de cría de especie. Además de los ruidos que se alargaron durante horas.
Los daños en el área protegida han preocupado por si habrían afectado a las especies asentadas en ese área. Según se ha explicado al Diari ni el chorlitejo patinegro ni la cigüeñuela que hay en la zona habrían sufrido daños. Tampoco los nidos que tienen en esa zona de playa.
De hecho se ha visto a los ejemplares y se ha controlado a los nidos que han hecho en la zona. Sin embargo la situación ha alarmado al Grup Ecologista de El Vendrell (Geven) que explica que no es la primera vez que las cuerdas que delimitan el acceso a una zona de playa aparecen destrozadas. El Geven pide al Ayuntamiento que repare los daños causados.
La basura acumulada en la zona y los daños al cercado del área los ha denunciado el vecino Michel Latoure que explica haber recogido desde botellas a plásticos, vasos y todo tipo de suciedad. Latoure también ha criticado a los ecologistas por no estar a primera hora recogiendo la basura y no haber vigilado la zona en una noche conflictiva.
Desde el Geven responden que no tienen posibilidades y competencia para montar controles. Los ecologistas piden al Ayuntamiento que en jornadas como la de ayer se prohiban algunas actividades que puedan suponer un riesgo para la recuperación natural de una zona como Les Madrigueres.
Ahora esperan que el Ayuntamiento vuelva colocar la cuerda que delimita el espacio de protección de las especies para que no se llene de bañistas y afecten a la cría del ave que paralizó la construcción del puente.
