Un caballo de Troya. Así define la plataforma ciudadana No Fem el CIM la intención de la Generalitat de desarrollar el Logis Penedès por fases y que comenzaría por 40 hectáreas del total de 150 de plataforma logística prevista.
El anuncio ha reactivado a la plataforma ciudadana No Fem el CIM, que hace más de una década se manifestó en contra del proyecto. Ayuntamientos como el de Banyeres también se oponen a las intenciones de la Generalitat.
'Tics depredadores'
No Fem el CIM avisa que esas 40 hectáreas son un primer pie de un gran complejo de cemento y de mercancías. «Vuelven a aflorar tics de las viejas políticas: falta de transparencia, ausencia de democracia, el modelo económico depredador, agotamiento de recursos...».
La plataforma denuncia que la Generalitat imponga en el Baix Penedès una actividad que quiere sacar de Barcelona y Tarragona. No fem el CIM defiende la potencialidad de una zona que en cambio pretende condenarse al hormigón y a una logística «a la china» y ajena al territorio.
Uso del territorio
«Sólo usan el territorio como una plataforma de lanzamiento de mercancías. Que no nos metan lo que no quieren en Barcelona o Tarragona. Estamos igual que antes de la crisis», denuncian.
Además añaden que faltarían todas las infraestructuras de carreteras o vías de tren que en todo caso serían necesarias para un complejo como el proyectado. Falta adecuar la autopista AP-7 o la AP-2 para el aumento de paso de camiones que generaría el Logis, desdoblar la N-340 o llevar hasta la zona una vía de tren para cumplir con el concepto de intermodalidad prevista.
En caso contrario el impacto sobre los pueblos sería mayor. No sólo faltan esas infraestructuras de gran capacidad. Las vías locales tampoco están preparadas para un aumento exponencial de tránsito. «¿Harán pasar a los camiones por la actual carretera de Banyeres a L’Arboç?».
El alcalde de Banyeres, Amadeu Benach, que acudió a una reunión con Cimalsa, en la que también estaban los máximos responsables de L’Arboç, Sant Jaume dels Domenys y Castellet, señala que se explicó que las naves serían más altas, con menos personal del que se decía en un inicio del proyecto y no se respondió sobre la adecuación de las infraestructuras viarias que exigiría la inversión.
‘No hay nada’
La plataforma denuncia que para el Logis «no hay nada previsto. No hay criterio. No existe. Lo pretenden levantar a partir de un cálculo». Y cuando se pregunta a Cimalsa cómo están esas infraestructuras, «no responden», explica el alcalde de Banyeres, Amadeu Benach.
No Fem el CIM ha reactivado la oposición al Logis que comenzará con campañas informativas y explicarán en los municipios el impacto que tendrá para la zona.
En este sentido lamentan una falta de modelo territorial, no sólo de la comarca sino de la veguería de Penedès y de la propia Catalunya.
No Fem el CIM plantean las posibilidades del Penedès como eje entre las dos grandes áreas urbanas de Catalunya. Aunque no hay proyecto alternativos detallados se apunta a que incluso, como en otras zonas de Europa, el Penedès puede jugar un papel de agroregión que nutra a la región.
Derecho a decidir
En este sentido mantendría el paisaje y los proyectos vinculados al enoturismo en los que trabaja desde hace años. «También puede acoger actividades de calidad que no caben en las ciudades». Si el criterio de la veguería era la capacidad de decisión para planificar el territorio, «ahora se ve como impuesto».
Variando la frase del economista Ramon Tremosa que dijo que el Penedès será logístico o no será, la plataforma No Fem el Cim avisa que «el Penedès, si es logístico, no será».
¿Qué es el Logis?
El Logis Penedès es un gran complejo logístico planificado por la Generalitat y que está previsto que desarrolle la empresa pública Cimalsa entre Banyeres del Penedès y L’Arboç.
El proyecto comenzó a hacerse público en 2006 tras unos años de secretismo en los que se iban comprando terrenos por la zona. Entonces ni los alcaldes sabían a qué respondía aquella compra de suelo hasta que algunos compradores reconocieron que eran en nombre de la Generalitat, pero pidieron discreción.
Cuando se conoció el proyecto hace más de una década hubo un fuerte rechazo ciudadano por el impacto que tendrá para el territorio ya que entonces se hablaba de más de 700 hectáreas. Además se avisaba que generaría pocos empleos y de poca cualificación.
La crisis paralizó cualquier inversión, pero el Logis ha seguido como una espada de Damocles sobre el Baix Penedès, aunque no se pasaba de declaraciones desde la Generalitat y Cimalsa que una última época defendían la bondad de la inversión y que ya era el momento de desarrollarla.
El escenario que se iba fraguando alertó a vecinos y ayuntamientos. En abril Cimalsa adjudicó por 179.685 euros la redacción del Plan Director del Logis. Añadió que comenzaría a hacerse por fases y que comenzaría por 40 hectáreas de las 150 previstas para base logística.