Vila-seca se encuentra inmersa en la 20a edición de la FiM, una feria dedicada a la música emergente y a los espectáculos musicales familiares. Después de haber vivido un primer día lleno de emociones en las 16 actuaciones que tuvieron lugar ayer jueves, el segundo día ha arrancado con gran entusiasmo por parte de los artistas y de los asistentes, que han llenado los espacios del evento con ganas de descubrir las propuestas de este año. Desde primera hora, el Celler, el Auditori Josep Carreras y el Castell han sido escenario de las primeras actuaciones de la jornada, que han contado con un público variado muy dispuesto a dejarse sorprender.
La FiM se dirige tanto a profesionales del sector musical como al público en general con inquietudes por conocer el estado de la creación en el ámbito musical emergente. Una parte de la programación está destinada al público escolar gracias a la vinculación de la Fira con los centros educativos del municipio.
Ayer jueves y hoy viernes, las escuelas e institutos de Vila-seca han asistido a diversos espectáculos que han permitido a los alumnos enriquecerse de la experiencia que supone ver en directo diferentes formas de expresión artística contemporánea. Esta integración de la educación en el marco de la Fira refuerza el desarrollo cultural de las nuevas generaciones, fomentando así la exploración de sus propias capacidades creativas.
En total, más de 3.000 alumnos han pasado por los asientos de la FiM y han disfrutado de las diferentes propuestas artísticas, con vocación transversal y capas de lectura para las diferentes franjas de edad, que la Fira ha programado para ellos.
Experiencias escolares
En el Celler de Vila-seca, David Font Forcada ha ofrecido el espectáculo Cançons amb trementina a unos 600 niños y niñas de cuarto, quinto y sexto de primaria de las escuelas de Vila-seca.
Todos han disfrutado, aprendido y se han conmovido con la historia de Aina, que a través de canciones y danzas tradicionales, acompañada por un trío de guitarra clásica, se ha sumergido en el mundo de las trementinaires. Una propuesta que reflexiona sobre la discriminación por la orientación sexual como legado cultural y que acerca a una historia de amor que, como tantas otras, fue silenciada.
Los alumnos no solo han disfrutado de la representación y de las melodías que sonaban, a las que todos se unieron con palmas, también han aprendido valiosas lecciones sobre el pasado y cómo estas influyen en el presente, despertando en ellos una gran curiosidad y empatía.
A las 12 h, el Castell de Vila-seca se ha llenado de ritmos urbanos, pop y electrónica con un toque flamenco gracias a Elena García, una de las propuestas Segell km0 de esta edición de la FiM. La joven ha cautivado a todos los asistentes con su delicadeza y profunda sensibilidad interpretando, junto a su banda, las canciones de su EP inaugural Wabi-Sabi.
El grupo ha sido muy bien recibido por un público profesional y otro un poco más joven, que han llenado los asientos disponibles y parte del recinto para disfrutar de la actuación en una magnífica mañana. Los alumnos de tercero de la ESO del Institut Vila-seca han asistido a la presentación y se han empapado de un talento emergente con el que se han podido sentir muy identificados.