El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, ha advertido este martes que no comparte ni fomentará ninguna “deriva militarista que nos aboque a una nueva carrera armamentística”, porque “el mundo tiene prioridades más urgentes que atender” y “no está escrito en ningún manual que la paz y la seguridad se conquisten reforzando arsenales”. Estas declaraciones las ha realizado durante la Conferencia de Embajadores 2025, después de que el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, advirtiera este lunes que los miembros de la alianza tendrán que elevar el gasto en defensa por encima del 3% del PIB o “empezar a aprender ruso”.
Durante su intervención ante los embajadores españoles, Sánchez ha recordado que buena parte de las amenazas a Europa no provienen del Este y ha pedido prestar atención al flanco sur de la alianza atlántica.
Sin citar explícitamente a Rutte, ha insistido en que, más allá del gasto militar, “España cree en la paz y la democracia como fórmula para resolver conflictos”. “Siempre defenderé que la seguridad va mucho más allá del gasto en defensa”.
A pocos días de la toma de posesión de Donald Trump como presidente, Sánchez ha subrayado que Estados Unidos es un “aliado imprescindible” y se ha mostrado confiado en que las relaciones comerciales entre Europa y Estados Unidos mantendrán una buena salud.
El presidente del gobierno español también ha instado a los embajadores españoles a “dar la cara” por los valores del ideal europeo “con mayor determinación y en todos los frentes”.
“España no se cierra sobre sí misma como hacen cada vez más países en el mundo, sino que se abre al mundo, y lo hace con decisión, convicción, ambición y una voluntad firme de liderazgo”.
