La Generalitat ha puesto en marcha un nuevo plan para afrontar inundaciones con medidas como el envío de alertas a los móviles de los vecinos de poblaciones que estén en riesgo “inminente”, e insta a los municipios obligados a tener planes de prevención y actuación en esta materia, y que aún no los tienen, a elaborarlos.
Protecció Civil de la Generalitat, el Servei Meteorològic de Catalunya (SMC) y la Agència Catalana de l’Aigua (ACA) informan este jueves en rueda de prensa sobre el nuevo plan que han elaborado y algunas de las medidas para enfrentar episodios de lluvias intensas que puedan provocar inundaciones repentinas, un fenómeno que ha ido en aumento debido al cambio climático.
La directora general de Protección Civil, Marta Cassany, explica que se está adaptando el actual plan INUNCAT ante estos fenómenos meteorológicos cada vez más frecuentes, que suponen un alto riesgo de inundaciones por lluvias muy intensas y localizadas, para así “prevenir crecidas como tsunamis”.
Cassany subraya que, entre los desastres naturales, las inundaciones son la primera causa de pérdida de vidas y daños económicos: en los últimos 40 años, más de 100 personas han muerto en Catalunya debido a inundaciones, principalmente por ríos, torrentes o zonas inundables en áreas urbanas, que normalmente están secas, pero que tras lluvias intensas sufren grandes crecidas de agua.
Ante un riesgo “muy inminente” de inundaciones “peligrosas”, y para que la población pueda autoprotegerse con medidas como el confinamiento o evitar acercarse a ríos o torrentes, Protección Civil enviará alertas a los móviles de los ciudadanos en las localidades afectadas.
Se trata de una herramienta que la Generalitat tiene disponible desde principios de 2023, también pensada para otras emergencias como el riesgo químico, y que en el caso de las inundaciones solo se ha utilizado en una ocasión, durante las inundaciones que este año afectaron a Ulldecona (Montsià).
Otra de las medidas que el SMC está ultimando es un nuevo baremo sobre el umbral de lluvias: actualmente hay dos, uno para concentraciones de 30 litros por metro cuadrado en períodos de media hora y otro para acumulaciones de más de 100 litros por metro cuadrado en 24 horas.
Ahora, se está trabajando en un tercer umbral, aún por concretar, por el cual se activará el plan INUNCAT cuando se prevea una gran cantidad de lluvia por precipitaciones “repentinas” a lo largo de tres horas.
Interior también urge a los municipios obligados a tener planes de prevención y actuación contra inundaciones, y que aún no los tienen, a que los elaboren, aunque admite que, si bien estos planes son obligatorios, Protección Civil no dispone de medidas sancionadoras para hacer cumplir esta normativa.
De los 521 municipios catalanes obligados a contar con un plan de inundaciones, un 11 % nunca lo ha tenido (60 poblaciones en total), 224 tienen el plan en vigor y 237 están pendientes de revisión, ya que estos caducan a los cuatro años.
A pesar de esto, Protecció Civil destaca que muchos municipios han cumplido con sus obligaciones, ya que en un año el porcentaje de municipios con planes en vigor ha aumentado del 33 % al 44 %.
Además de estas medidas, el Departamento de Interior lanzará una campaña informativa en los medios de comunicación para concienciar a la población sobre los riesgos de las inundaciones y las crecidas de ríos y torrentes.
El SMC también está trabajando en la renovación tecnológica de sus cuatro radares, con un nuevo radar que estará operativo a finales de 2025.
Asimismo, el ACA tiene en marcha un proyecto para disponer, hacia finales de 2026 o principios de 2027, de una cartografía de inundaciones para todos los municipios con más de 1.000 habitantes.