El pasado julio fue un mes muy cálido, muy seco, con precipitaciones muy escasas, y con 1,3 ºC por encima de la media normal, lo que lo convirtió en el sexto julio más caluroso desde el comienzo de la serie histórica de España (1961) y el quinto del siglo XXI.
Son datos del balance mensual de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), que apunta que la temperatura media en julio fue de 24,4 ºC, anomalía que se establece en 1,3 ºC por encima de la media de lo normal para este mes en relación con el periodo de referencia 1991-2020.
Se superaron los 40 °C en muchas zonas; además, hubo tres episodios cálidos de corta duración, los cuales, según la Aemet, "no alcanzan los criterios para catalogarse como olas de calor", durante los días 4-5, 10-11 y 18-20 de julio.
Estos días alternaron con períodos de temperaturas normales o algo por debajo, como el día 1 o las jornadas del 6 y 7 de julio.
En relación a las precipitaciones, este mes fueron muy escasas, según la Aemet, y tuvo un carácter muy seco, con un valor de precipitación media sobre la España peninsular de 10,2 litros, lo que representa el 61 % del valor normal del mes, de acuerdo al periodo de referencia 1991-2020. Se convirtió así en el décimo cuarto julio más seco desde el comienzo de la serie en 1961 y el quinto del siglo XXI.