El comisario francés, Thierry Breton, inicialmente propuesto por el gobierno de su país para continuar en la Comisión Europea, anunció este lunes que dimite tras asumir que no formará parte del futuro Ejecutivo de la UE, porque, según dijo, su presidenta, Usrula Von der Leyen, ha presionado a Emmanuel Macron para que designe otro candidato, y este ha aceptado.
«Hace unos días, en el último tramo de las negociaciones sobre la composición del colegio de comisarios, usted pidió a Francia que retirase mi nombre, por motivos personales que en ningún momento ha discutido conmigo, y supuestamente ofreció a cambio una cartera más importante para Francia», dijo Breton en una carta a dirigida a Von der Leyen.
El actual comisario de Mercado Interior, de 69 años, hizo pública esa misiva en la red social X, en donde asumía que París presentará ahora un nuevo o nueva aspirante, pese a que su candidatura había sido previamente confirmada, y anunció que dimite.
«En los últimos cinco años, he luchado incansablemente por defender y promover el bien común europeo, por encima de los intereses nacionales y partidistas. Ha sido un honor. Sin embargo, a la luz de los acontecimientos recientes -un testimonio más de una gobernanza cuestionable- debo concluir que ya no puedo ejercer mis funciones», agregó el francés.
En el presente Ejecutivo comunitario, Breton se ha ocupado de áreas como la digitalización, la industria, la defensa o el espacio.
El liberal francés mantenía una tensa relación con Von der Leyen, que se hizo evidente cuando antes de las elecciones al Parlamento Europeo cuestionó públicamente en las redes sociales el escaso apoyo que la cristiano-demócrata alemana había recabado en su propia familia política, el Partido Popular Europeo, para que esta la presentase como candidata a repetir al frente de la Comisión.
La dimisión anunciada hoy se produce a dos días de que este miércoles, en principio, Von der Leyen presente el que será su nuevo colegio de comisarios, que será escrutado individualmente y sometido colectivamente a la aprobación del pleno del Parlamento Europeo.