El Ejecutivo comunitario sigue tomando acciones para regular la actividad de las grandes tecnológicas en Europa. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, anunció este martes que iniciará un procedimiento formal contra Meta -empresa matriz de Facebook e Instagram- por posibles infracciones de la Ley de Servicios Digitales. En concreto, Bruselas teme que la plataforma no cuente con los mecanismos necesarios para evitar la publicidad engañosa y la desinformación en sus redes sociales.
«Esta Comisión ha creado medios para proteger a los ciudadanos europeos de la desinformación y la manipulación selectivas por parte de terceros países. Si sospechamos de una infracción de las normas, actuamos», señaló Von der Leyen. A apenas cinco semanas de las elecciones europeas -que se celebrarán entre el 6 y el 9 de junio-, la lucha contra las campañas de desinformación debe ser más fuerte que nunca y «las grandes plataformas digitales deben estar a la altura de sus obligaciones de destinar recursos suficientes a esta cuestión». La presidenta de la Comisión destacó que esta decisión «muestra que somos serios en cuanto al cumplimiento. Proteger nuestras democracias es una lucha común con nuestros Estados miembros».
El procedimiento de Bruselas se centrará en las sospechas de que Meta no cumple con sus obligaciones relacionadas con la lucha contra la difusión de anuncios engañosos y campañas de desinformación. El comunicado de la Comisión Europea hace referencia a que «la proliferación de este tipo de contenidos puede suponer un riesgo para el discurso cívico, los procesos electorales y los derechos fundamentales, así como para la protección de los consumidores».
Preocupa, igualmente, la visibilidad del contenido político y si Facebook e Instagram cumplen con sus obligaciones de transparencia y reparación de los usuarios, así como su correcta clasificación. La Comisión sospecha, además, que el mecanismo para señalar los contenidos ilícitos no cumple las obligaciones de la Ley de Servicios Digitales, que incluyen que sea de fácil acceso y uso. Bruselas cree que Meta tampoco ha establecido «un sistema interno eficaz» de reclamaciones contra las decisiones de moderación de contenidos adoptadas.
Nuevo expediente Detrás de esta iniciativa subyace la preocupación de la Unión Europea por la falta de control con que estas plataformas digitales asumen su responsabilidad en la difusión de informaciones falsas o que suponen un peligro por incitar a la violencia o la radicalización. El pasado mes de octubre ya inició otro expediente sancionador por haber permitido la difusión de ‘fake news’ y contenido creado por los terroristas de Hamás tras la invasión del sur de Israel, en el que murieron 1.200 personas y otras 200 fueron secuestradas. En esas mismas fechas solicitó información a Meta por dicha cuestión.
En el nuevo expediente contra Meta subyace el temor a la injerencia rusa en las elecciones europeas, aunque no se cita directamente a este país. En abril de este año, Bélgica anunció la apertura de una investigación ante la supuesta existencia de redes prorrusas dedicadas a favorecer a los candidatos partidarios de Putin en los comicios europeos.
El pronunciamiento más contundente de la Unión Europea se produjo el 8 de febrero, cuando el Parlamento de Bruselas aprobó un texto en el que condenó «los continuos esfuerzos de Rusia por socavar la democracia europea». En ese pronunciamiento se mencionaba de manera expresa el apoyo de Moscú a los movimientos separatistas en Europa, como en Cataluña, y se recordaba que los eurodiputados han expresado su «profunda preocupación por las supuestas relaciones entre los secesionistas catalanes y el Gobierno ruso».
Las redes sociales también tenían un protagonismo directo en este documento, ya que se recordaba que en la hoy denominada X -antes Twitter- había comenzado a detectarse una «creciente propagación de desinformación y contenido ilegal».