La Audiencia de Barcelona ha amnistiado a cuatro Mossos d'Esquadra acusados de agredir a dos manifestantes en octubre de 2019, con lo que se convierten en los primeros agentes de la policía catalana investigados por su actuación en las protestas del procés que se benefician de la ley.
En un auto, la sección décima de la Audiencia acuerda aplicar la amnistía a los cuatro agentes, que afrontaban una condena de cuatro años y medio de prisión por los delitos de lesiones y contra la integridad moral, y también a los dos manifestantes que los denunciaron, quienes estaban a la espera de ser juzgados por delitos de desórdenes públicos y atentado a la autoridad, entre otros.
Es la primera vez que se aplica la amnistía a los mossos investigados por supuestos abusos policiales contra manifestantes independentistas, ocurridos principalmente en la oleada de protestas de octubre de 2019 contra la sentencia del procés.
El pasado 25 de junio, fue también un mosso d'esquadra, Lluís E., el primero en beneficiarse de la amnistía, junto al exconseller de Interior Miquel Buch, tras ser condenado por ejercer de escolta del expresidente catalán Carles Puigdemont después su huida de España mientras cobraba sueldo de asesor del Departamento.
El juicio contra los cuatro agentes y los manifestantes acusados de atentado a la autoridad ya fue suspendido el pasado 22 de mayo, ante la inminencia de la aprobación de la ley de amnistía, a la que el Congreso dio luz verde ocho días después.
La Fiscalía no presentó cargos contra los agentes, a quienes solo acusaba la acusación particular ejercida por los manifestantes, que pedía para ellos una pena de cuatro años y medio por delitos contra la integridad moral y lesiones.
Por su parte, el Ministerio Público pedía nueve años y medio de cárcel para los manifestantes, dos vecinos de la localidad barcelonesa de Parets del Vallès (Barcelona), una condena que la Generalitat -personada como acusación popular- rebajaba hasta los tres años y medio, al tiempo que reclamaba la absolución de los cuatro mossos.
En concreto, los manifestantes, que fueron detenidos y pasaron 14 días en prisión preventiva, acusaban a los policías de haberles apaleado durante su arresto.
A su vez, la Fiscalía acusaba a los activistas de delitos de desórdenes públicos agravados, atentado agravado por uso de instrumento peligroso y daños agravados, ya que mantenía que habían lanzado objetos contundentes y globos con pintura contra un vehículo de los Mossos d'Esquadra en una protesta ante la Casa Batlló del paseo de Gràcia, el 18 de octubre de 2019.
En su resolución, la Audiencia de Barcelona argumenta que están incluidos en la amnistía tanto los desórdenes que se atribuyen a los manifestantes como la conducta de los mossos encausados y recuerda que todas las partes han coincidido en solicitar que se aplique la ley a los seis acusados.
En el caso de la actuación de los agentes, la sala concluye que no reviste la «gravedad» que exige la ley para que quede excluida de la amnistía. «Entendemos que las conductas de unos y otros son perfectamente amnistiables», sostiene la Audiencia de Barcelona.