En menos de 48 horas, el pleno del Ayuntamiento de Tarragona debatirá si incrementa los impuestos para el próximo año. En plenas negociaciones con ERC, Junts y ECP, la concejal de Hisenda, Isabel Mascaró (PSC), concede al Diari de Tarragona su primera entrevista desde que asumió el cargo el pasado mes de junio.
¿En qué situación económica se encuentra el Ayuntamiento?
Es la que todos conocemos, y que no es exclusiva de Tarragona. Es necesaria una reforma de la financiación de los entes locales. Primero se cambió el IAE y, hace poco, la plusvalía. Todo ello ha supuesto una bajada brutal de ingresos.
Faltan 14 millones.
Sí, para un presupuesto de mínimos. Han aumentado los tipos de interés de los créditos, lo que nos ha supuesto 2,1 millones de más; los organismos municipales querían subir un 7% (2,5 millones más); también tememos ingresar 1,5 millones menos; y la inflación nos influye en todos los contratos.
¿Cómo definiría todo este cuadro que explica?
Tenemos un problema en el gasto corriente para el día a día.
El alcalde dijo que la situación es de «quiebra». ¿Es así?
Es delicada. No buscamos culpables, la confluencia de todos los factores nos obliga a tomar medidas. El gasto en cuatro años ha subido un 14% y los ingresos un 8%. Y para 2014 el remanente deberá ir a pagar deuda y no al día a día.
¿Eso es buena o mala noticia? La deuda municipal es elevada.
Está controlada. Con el PSC ya se bajó del 110%, y el conseller Fortuny (ERC) la situó en el 82%. La voluntad es seguir bajándola, pero primero queremos un pacto para incrementar los ingresos.
¿La única solución es subir los impuestos?
No. Es una de las posibilidades, junto a las medidas de eficiencia, como en los organismos municipales: de subir el 7% se ha pasado a bajar el 5%.
Inicialmente se planteó una subida del 20% del IBI, que ha pasado al 7,4%. Este impuesto ya es muy elevado en TGN.
El 7,4% es fruto de las negociaciones políticas con ERC, ECP y Junts. Necesitamos un acuerdo de ciudad. En el IBI no se actualiza el valor catastral desde hace años.
¿Pedirán al Estado actualizarlo?
Sí. Ya hemos tenido contactos, pero es un proceso largo. Igual tarda cinco años...
¿El 7,4% del IBI es la última oferta o hay tiempo para negociar hasta el jueves?
Tenemos de plazo hasta el mismo jueves para negociar un acuerdo de ciudad. Nuestra voluntad es llegar a un pacto, las negociaciones están abiertas.
ERC se ha plantado en el 3,5%. ¿Qué le parece?
Con un 7,4% llegamos a 6,8 millones. Nos faltarían siete más...
Lo descarta, pues.
No hay líneas rojas, estamos hablando.
¿Qué pasaría si no se aprueba ningún incremento?
Ahora no trabajamos en esta hipótesis. Suprimiremos todo lo superfluo para priorizar servicios esenciales.
¿Qué es lo prioritario?
Los servicios públicos: atención social, escuelas, policía, limpieza...
Quieren subir la basura un 12%. El año pasado ya se encareció un 28%.
Cumplimos la ley de residuos, que nos obliga a que en 2025 la tasa debe cubrir todo el servicio. Serán entre uno ó dos euros al mes. Por esto queremos una tarifa social de 50 euros para mil familias.
Triplican el recargo del IBI por pisos vacíos.
Debe incentivarse el uso de la vivienda. Tenemos un grave problema en la ciudad. Por esto pasamos del 50% al 150%, queremos un parque más dinámico.
Quieren subir el ICIO al máximo legal. ¿Frenará inversiones?
No lo creemos. Nos permitirá ingresar 1,1 millones.
¿Por qué han frenado la bonificación del 90% del IBI a los clubes deportivos de 40 años?
Se valoró, pero ahora priorizamos otras medidas para apoyar al deporte. No irá al pleno, no es el momento.
¿Derogar la bonificación de las placas solares va en contra del impulso de las renovables?
No. La mayoría de peticiones son de viviendas unifamiliares, no de bloques de pisos (solo tenemos tres). Ya hay ayudas de otras administraciones.
Usted viene de Agbar. ¿Le sorprende que el Ayuntamiento gaste el 10% de sus recursos en pagar deuda?
No tiene nada que ver, en la empresa privada puedes arrastrar un presupuesto de un año para otro.
¿Falta generar más IBI para que Tarragona sea viable?
Debemos analizar los ingresos y racionalizar el gasto. Tras las ordenanzas nos pondremos a negociar el presupuesto.
