Poco después de las ocho de la mañana del pasado miércoles, 15 de enero, los bomberos recibieron el aviso de un incendio en una nave abandonada situada en el número 7 de la calle Carbó del polígono industrial Riuclar.
Cuando las dos dotaciones entraron al interior vieron que había un problema eléctrico debido a la precaria instalación, que suministraba calor a una gran plantación de marihuana. Mientras, en el exterior diversos trabajadores de las empresas cercanas seguían las labores de extinción.
La mayor parte de las plantas fueron llevadas a la incineradora de Riuclar para su destrucción –con el correspondiente permiso del juez instructor– y una pequeña parte será analizada en el laboratorio. Por el momento no hay detenciones. Los agentes tienen que averiguar de quién es la nave abandonada.