La ciudad de Tarragona ha vuelto a batir su récord histórico de visitantes este verano, el cual ya rompió la temporada pasada, demostrando la fuerza que ha cogido este sector desde la pandemia. Esta última temporada, durante los meses de verano, se ha superado por primera vez la cifra de 200.000 visitantes. Concretamente, han llegado a las 202.905 turistas, cifra que supone un aumento del 1,6% respecto al año pasado.
Si se toma como referencia el 2019, último año prepandémico, la subida ha sido del 25,8%.
No obstante, uno de los datos más destacados del balance de este verano es un leve descenso en las pernoctaciones, que no responden a la gran cantidad de visitantes únicos. Tomando como referencia el anterior periodo, han dormido un 6,7% menos de turistas en la ciudad. En total han sido 871.737 las pernoctaciones.
Los campings siguen liderando el número de camas, tanto disponibles; con 9.996 unidades de acampada, como ocupadas, con 122.327 estancias contabilizadas. Sin embargo, este sector es también el que ha sufrido un mayor descenso en su actividad, con una bajada del 7,5% en referencia al 2022.
La estancia media en estos establecimientos consiguió un gran logro en 2022 con 6,3 días de media, una unidad por encima de 2019, mejor año hasta el momento. Por contra, este año ha bajado unas décimas hasta una media de 5,8.
Los establecimientos hoteleros de la ciudad ofrecen 2.299 camas, que se han traducido en 80.578 pernoctaciones.
Esta cifra también supone una bajada respecto al año anterior pero mucho menos pronunciada, situándose un 3,2% por debajo. La media de estancias ha descendido una décima respecto al año pasado, de 2,2 a 2,1, quedándose en el resultado de los años pandémicos.
Para Montse Adan, regidora de Turisme del Ajuntament de Tarragona, este descenso vendría provocado principalmente por la inflación. La situación de desconcierto habría afectado esencialmente durante el mes de junio, que obtuvo unos resultados por debajo de la media de otros años. El resto del verano, habría mantenido cifras similares.
En global, la ocupación durante este verano ha sido del 75,9%, lo que representa una caída de 6,4 puntos frente al anterior, pero que supera ligeramente el resultado de 2019, que se quedó en el 75,2%. En este caso, los hoteles toman ventaja con un 78,9% de media frente al 75,2% de los campings. Durante los meses de julio y agosto, la ocupación global ha subido hasta el 83,1%.
En lo que se refiere a la procedencia de los turistas, el mercado estatal sigue siendo el predominante, con un 57% del total, traducido en 500.209 pernoctaciones. Sin embargo, la recuperación del turismo internacional se hace notar, con 371.528 extranjeros durmiendo en la ciudad durante este verano.
De hecho, en el sector hotelero este mercado representa la mayor parte con un 59% de cuota. Los campings son el modelo más escogido por los españoles, que ocupan un 61% de las plazas.
El turismo español sigue liderando con un 57% del total, Países Bajos ocupa el segundo lugar
Dentro del mercado estatal, los catalanes ocupan casi la mitad con un 47%. Este segmento se hace notar también más en los campings, donde ocupan un 33,7% de las localidades disponibles. En comparación, solo ocupan un 17,5% de las camas hoteleras, mientras que los residentes en otras comunidades representan un 24,4%.
En cuanto al turismo internacional, el mercado francés ha perdido presencia en el territorio, con un 9.8% del total, aunque sigue siendo el más destacado en el sector hotelero. El podio turístico lo ocupan los habitantes de Paises Bajos, que representan un 11.7% del total, este segmento se declina más por los campings de la ciudad. En orden, a estos dos segmentos les siguen Alemania, Gran Bretaña y Bélgica.
Sin contar apartamentos
El estudio publicado este año no muestra aún los datos de los apartamentos de uso turístico, ya que Eurecat los recoge desde hace poco tiempo y no cuenta con un histórico que se pueda comparar. De esta manera, los datos no son representativos del volumen total de visitantes que han pernoctado durante este verano.
Cabe tener en cuenta, que según un estudio publicado por el Institut d’Estadística de Catalunya, la ciudad contaba en 2022 con 9.862 camas de este tipo, cerca de las de los campings, el principal grupo turístico.
Las estancias en apartamentos turísticos no contabilizan, aunque tienen casi 10.000 camas
Desde la Associació d’Apartaments Turístics de Tarragona Ciutat estiman alrededor del 80% la ocupación de este verano, con una estancia media de entre 4 y 5 días. Estos valores podrían ampliar en otra centena de millares las pernoctaciones totales.
Montse Adan se muestra favorable a incluir estas cifras en los estudios que se hagan de aquí en adelante, manifestando que «la realidad ha cambiado y debemos adaptarnos a los tiempos actuales». Además, remarca que tampoco se tienen en consideración los cruceristas o los habitantes de segunda residencia, asegurando que están trabajando en «poder ofrecer una radiografía real».
Objetivos del mandato
Desde la regiduría de Turisme, indican que el principal objetivo actual es conseguir una «diversificación de la oferta turística», que aumente la ocupación durante las temporadas bajas. De hecho, se ha hecho notar un importante crecimiento en el último año. En abril y mayo, las pernoctaciones han crecido en más de 30.000 personas cada mes.
Si tenemos en cuenta las cifras entre enero y septiembre, este año ha crecido en un 4,9% respecto al anterior.
Más allá de esto, Adan considera también necesario ampliar el parque hotelero, para ello, asegura que deben «hacer una ciudad atractiva que incite la inversión». Los apartamentos turísticos también marcarán el mandato, por el momento, presumiblemente en 2024 se aplicará una moratoria que impedirá su crecimiento.
Pasado este margen, Montse Adan aboga por una rápida regularización del sector, a través de un Pla Especial d’Usos previo a la ordenanza municipal.
