Los comunidad universitaria de la Rovira i Virgili está llamada hoy a las urnas. Un total de 16.071 miembros, entre estudiantes, profesores y PAS, podrán participar en una elección en la que se decidirá la continuidad de Josep Antón Ferré para su segundo mandato o la entrada de María José Figueras, que se convertiría en la primera rectora de esta institución.
Des de las nueve de la mañana se han constituïdo las mesas en cada campus. Una hora más tarde se han abierto los colegios, que cerrarán a las cinco de la tarde para empezarse el recuento.
Aproximadamente a las 18.30 podría empezar a conocerse el nombre del ganador. El proceso de recuento es complejo, ya que no es un sistema de una persona, un voto, y en función del colectivo el peso es muy diferente. De hecho, en las pasadas elecciones Agustí Segarra ganó en cuanto a número de votos, pero al final fue Josep Antón Ferré el que acabó imponiéndose.
En esta ocasión, Segarra ha dado su apoyo a María José Figueras, que ayer aseguraba que esta campaña «ha sido una experiencia inolvidable». Reconocía que de los contactos que ha establecido con los diferentes colectivos a lo largo de estas últimas semanas, sale con «tres libretas» de sugerencias y propuestas de mejora.
Pese a ello, ya avanzó que «no venimos aquí para deshacer todo lo que se ha hecho ni paralizar la obra que se ha iniciado, pero sí para cambiar lo que puede funcionar mejor».
Ha sido una campaña en la que ha habido hostilidad entre los dos contrincantes. El cierre de campaña, sin ir más lejos, fue toda una declaración de intenciones. Josep Antón Ferré celebró ayer su último acto en la Facultat de Medicina de Reus, donde Figueras es Catedrática en Microbiologia.
Por su parte, la candidata se decidió por la Escola Tècnica Superior d’Enginyeria Química (ETSEQ), siendo Ferré catedrático de Mecànica de Fluïds.
Tras el acto, Ferré describió que la reacción que se ha encontrado estos días ha sido la de «mucha gente con ganas de seguir trabajando y a la vez preocupada por si tendremos los recursos para hacerlo». Apuntaba que una de las preguntas que le han hecho más en las últimas semanas ha sido sobre la formación del nuevo Govern y si tenía información sobre el papel que jugará la universidad para el nuevo Ejecutivo.
«Muchos equipos te comentan la necesidad de renovación de equipamientos y entienden que es una situación excepcional, pero que ahora que la economía está creciendo, esperan que muy pronto deje de serlo», argumentaba.
Ferré asegura que ha celebrado alrededor de 25 actos, uno en cada una de las doce facultades y otros trece aproximadamente monográficos con todos los colectivos de la universidad.
El interrogante de los alumnos
Figueras es la primera ocasión en la que se presenta a una empresa de semejantes características. Destacó que entre las prioridades que se ha marcado está «reconocer a los profesores todas sus actividades y potenciar la formación semipresencial».
Por ello, apuntaba que una de las primeras acciones que pondrá en marcha si hoy es elegida rectora de la Universitat Rovira i Virgili será impulsar un estudio «profundo» de la plantilla y de las acciones prioritarias.
En cambio, Ferré manifestó que «no he cambiado las prioridades porque ya las habíamos planteado tras escuchar en los consejos de gobierno las demandas de los diferentes colectivos».
Pese a ello, reconocía que la campaña «ha sido un instrumento de diálogo con la comunidad, ya que hablas con personas con las que quizás en el día a día no te relaciones tanto».
Se espera una elevada participación en unas elecciones que decidirán el máximo representante de la universidad de las comarcas del sur de Catalunya para los próximos cuatro años. El interrogante está en el alumnado. En los últimos comicios ni siquiera el 6% de los 13.973 estudiantes llamados a las urnas fue a depositar su voto.