Ajenos a la música del Carnaval que este sábado llenaba las calles de Roda de Berà, los operarios de Adif trabajan a contrarreloj para que este lunes pueda reabrir el túnel de Roda de Berà, en obras desde el pasado 1 de octubre.
Tanto en el interior como desde el exterior, el ritmo es frenético, ya que en este tramo final tienen que iniciarse las primeras pruebas de circulación. Según lo previsto, este lunes por la mañana tienen que hacerse las primeras circulaciones comerciales, sin pasajeros, que determinarán cuándo podrá reabrir la nueva infraestructura.

Los trabajos se centran en las actuaciones de electricidad, mientras en las inmediaciones del túnel una máquina se encarga de remover el balasto para nivelar la vía. Unas obras que avanzan con la cuenta atrás en marcha, mientras este fin de semana los operarios también están actuando en la estación de Sant Vicenç de Calders, que también estará cerrada hasta el lunes.
Vía libre a las mercancías
La adaptación del túnel, de 420 metros de longitud, forma parte del conjunto de intervenciones para la instalación del ancho internacional del Corredor del Mediterrani. De hecho, esta es una de las últimas puertas que faltan para abrir, para que los convoyes de mercancías puedan salir directos desde Tarragona hacia el centro de Europa.
La obra de adaptación de esta infraestructura a los estándares internacionales ha comportado una inversión de 16 millones de euros. Esta ha supuesto una mejora de la impermeabilización, así como la sustitución de las vías, que en el interior del túnel serán en placa. Asimismo, se han sustituido los sistemas de seguridad y electrificación, lo que permitirá eliminar la limitación temporal de velocidad que hacía que los convoyes no pudieran superar los 30 km/h cuando pasaban por el interior del túnel.