Las obras de la nueva terminal de cruceros encaran su recta final. Así lo confirma la empresa concesionaria de las nuevas instalaciones, Global Ports Holding, quien asegura que de acuerdo con el calendario previsto los trabajos acabarán a «finales del próximo mes de abril».
El proceso de construcción se está haciendo de forma acelerada, después que las instalaciones estarán formadas por módulos que se fabricaron previamente en Almería.
Ahora prácticamente tan solo tienen que ensamblarse las piezas para generar una terminal, con una superficie de 2.200 metros cuadrados, que comportará una inversión total de 5,5 millones de euros.
«Se está haciendo la conexión de las instalaciones y en estos momentos la parte de la cubierta ya está muy avanzada, por lo que después tan solo faltará cerrar los laterales», asegura la commercial manager de la compañía, Alba Colet.
Todavía no hay una fecha concreta para la entrada en funcionamiento de las nuevas dependencias, ya que dependerá de la finalización de los trabajos y de cuándo pueda formalizarse el trámite de recepción de las obras. No obstante, la actuación afectará el inicio de la nueva temporada de cruceros, que arrancará el domingo día 7 de abril.
Durante estas primeras semanas los buques atracarán de forma provisional en el Moll de Costa y el Dic de Llevant, por lo que los pasajeros se encontrarán con una carpa provisional. «Será un mes de transición y hay que tener en cuenta que durante las primeras semanas estamos hablando de cruceros pequeños, aunque también hay algún MSC que veremos cómo gestionaremos», decía Colet.
En cambio, sí que está fijada la fecha para la inauguración. Esta será el día 11 de junio, coincidiendo con la primera jornada de la asamblea MedCruise, un evento que llega a su 64a edición y que aglutina a los diferentes actores relacionados con la actividad de cruceros como las navieras, agentes portuarios, patronatos de turismo y demás compañías vinculadas con esta industria.
Desde el territorio quiere aprovecharse este evento internacional, para la puesta de largo de unas nuevas dependencias que buscan generar un salto en esta actividad. Colet se muestra convencida que la futura terminal supondrá un «punto de inflexión» para la actividad de cruceros en el Port de Tarragona, lo que cree que comportará «un salto cualitativo y cuantitativo».
La futura terminal debe facilitar las operativas de embarque y desembarque de cruceros en el Moll de Balears, que desde su inauguración a finales de 2021 no contaba con unas instalaciones fijas para dicho fin.
En el interior los cruceristas se encontrarán con un espacio «amplio» y «diáfano», de forma que podrán generarse distintos espacios, «según las necesidades de las navieras y que nos permitan gestionar los flujos de pasajeros».
El edificio contará con los puntos de control y aduanas, una zona de espera con bancos y baños, además de un punto de información turística, una cafetería y una tienda de regalos. «Ahora estamos en proceso de buscar quién gestionará estos dos últimos servicios», afirma Colet, quien se muestra convencida de que las nuevas dependencias permitirán que «la percepción y la experiencia del crucerista sea más agradable y digna». Asimismo, las nuevas instalaciones contarán con placas solares que deben permitir que las instalaciones sean autosuficientes a nivel energético.
El objetivo es que más allá de la temporada de cruceros –que desde mediados de diciembre a inicios de abril no tiene escalas en el Port de Tarragona– el espacio pueda alquilarse para la celebración de eventos.
El proceso de construcción se está llevando de forma paralela a la urbanización del Moll de Balears. En este caso, la actuación va a cargo de la Autoritat Portuària de Tarragona que está adaptando la explanada de 40.000 metros cuadrados del nuevo muelle con aceras y las paradas para los taxis y autobuses.