El Departament de Territori de la Generalitat impedirá la construcción de más de 36.000 viviendas nuevas en la demarcación de Tarragona. Lo hace después de aprobar definitivamente el Pla Director Urbanístic (PDU) de Sòls no Sostenibles del litoral, entre Malgrat de Mar y Alcanar, en que se ha analizado el planeamiento urbanístico de una veintena de municipios de las comarcas del sur de Catalunya, que han sido revisados bajo «parámetros modernos de sostenibilidad».
En concreto, el número de viviendas que no podrán construirse asciende a 36.095, sumando aquellos ámbitos que directamente han sido desclasificados como urbanizables y los sectores que han sido revisados respecto a lo previsto inicialmente. La cifra representa un 82% del total de pisos que no podrán construirse por la aprobación del plan, que sumándole las comarcas del Garraf y el Maresme asciende a 43.600.
Los afectados
Esta revisión afecta a dos municipios del Baix Penedès (Cunit y El Vendrell); siete del Tarragonès (Roda de Berà, Creixell, Torredembarra, Altafulla, Tarragona, Vila-seca y Salou); tres del Baix Camp (Cambrils, Vinyols i els Arcs y Mont-roig del Camp); uno del Baix Ebre (L’Ametlla de Mar); y otros dos del Montsià (Amposta y Alcanar). Asimismo, hay casos como Calafell, L’Hospitalet de l’Infant y Deltebre, entre otros, que también se han incluido dentro de este PDU, pero que ya tenían su planeamiento adaptado. En estos casos, los sectores en cuestión tan solo estarán sometidos a los requerimientos paisajísticos.
Esta revisión se ha hecho ámbito por ámbito, teniendo en cuenta cinco criterios. El primero de estos es territorial, es decir, si el sector previsto respeta la estrategia de crecimiento que marca para aquel municipio el Pla Territorial Parcial. El segundo aspecto ha sido el urbanístico, por tanto, si el sector a construir es continuo al núcleo urbano, siguiendo un modelo de compacidad. En cuanto al tercer elemento es el que está relacionado con los aspectos ambientales y, por tanto, si el sector en cuestión afecta al sistema de espacios naturales protegidos de Catalunya y la biodiversidad. Finalmente, los dos últimos son los que hacen referencia a aspectos sectoriales y de carácter paisajístico.
Tras este análisis algunos sectores se han mantenido tal cual estaban previstos, otros han sido modificados y, finalmente, hay un tercer grupo que directamente han sido desclasificados. El conjunto de los sectores de crecimiento que seguirán adelante en las comarcas tarraconenses permitirán la construcción de casi 26.500 nuevos pisos.
Tarragona queda fuera
El plan ha permitido desclasificar algunos sectores que en su momento habían generado polémica en el territorio, como es el caso de Els Munts d’Altafulla o Les Brises de Mar, en este mismo municipio.
En cuanto a la ciudad de Tarragona, esta ha quedado fuera ya actualmente este municipio se rige por unas normas urbanísticas, después que el Tribunal Supremo suspendió el POUM 2013. Esto comportó que todos los planes parciales como La Budellera o La Vall del Llorito ya quedaron anulados. En cambio, este plan director no ha afectado a las 6.138 viviendas que se mantuvieron a través de los polígonos de actuación, que corresponden a suelo urbano.
de este plan director
Sin embargo, los criterios urbanísticos que ha establecido el Departament de Territori con la aprobación de este plan director sí que podrían marcar la redacción del futuro POUM, lo que podría acabar comprometiendo proyectos como Mas d’en Sorder, que podrían estar en entredicho.
La aprobación de esta plan director se suma a los otros dos ya aprobados con anterioridad, que afectaban a la zona del Pirineu y la Costa Daurada. Entre los tres se ha frenado cerca de 43.600 viviendas en Catalunya. La consellera Ester Capella aseguraba ayer que «el Govern de la Generalitat actúa protegiendo todo el litoral, de norte a sur».