La Cambra de Comerç de Tarragona pide potenciar el servicio de autobús con Barcelona, «delante de la saturación del sistema ferroviario». La petición se hace en un momento en el que los usuarios que se desplazan a diario a la capital catalana han levantado su voz delante de las incidencias reiteradas que afectan a su situación laboral, y en vistas a las obras que tienen que llevarse a cabo en el túnel de Roda de Berà, que comportarán varios meses de afectaciones.
Por este motivo, el pleno de la corporación tarraconense acordó el lunes exigir a la Generalitat de Catalunya la tarjeta T- 10/120, un título de transporte que permite hacer diez viajes, en un periodo de 120 días. «Sería un complemento, como tienen en Mataró, Vilanova y Sabadell, que te permite generar una alternativa de transporte por carretera, para no colapsar un sistema ferroviario, que ya va muy tensionado», argumenta el responsable de Estudis de la Cambra, Jordi Cáceres.
La Cambra de Tarragona expone que la Autoritat Territorial del Transport (ATM) del Camp de Tarragona es la única que no ofrece este título de viaje, de cara a los usuarios que se desplazan a Barcelona. En cambio, tanto las Terres de l’Ebre, como Girona y Lleida sí que pueden adquirir este bono. «Somos el territorio que mueve más gente en transporte público en este corredor y el único que tiene esta tarjeta bonificada», argumenta del director general de la Federació d’Empreses d’Autotransport de la provincia de Tarragona, Josep Lluís Aymat.
La Cambra de Tarragona lleva más de cinco años reivindicando que pueda implementarse, por parte del Departament de Territori de la Generalitat, ya que la administración catalana es la que asume el coste de las bonificaciones en el transporte que comporta. Y es que, para que este título tenga una demanda, una de las cuestiones que se establece como prioritaria es que debería «equipararse» su precio, respecto al ferrocarril.
Por este motivo, los diversos cálculos que se han hecho apuntan a que el coste para el viajero podría ser del orden de 25 euros por título, lo que representaría 2,50 euros por viaje, teniendo en cuenta que la Generalitat asumiría el otro 50%, en forma de bonificación.
Propuesta para los partidos
La Cambra de Tarragona defiende que en estos momentos «se está dando la coyuntura para que la propuesta pueda seguir adelante». Por un lado, porque el país está en un contexto electoral, con un Govern en funciones, y, por el otro, porque «la situación actual pone de manifiesto que el servicio ferroviario necesita un complemento». Así se lo han expuesto a los candidatos que estos días visitan el ente cameral para conocer las demandas del tejido económico y empresarial, de cara a esta campaña electoral para las elecciones del próximo 12 de mayo. «Es muy importante que se ponga este tema encima de la mesa y que haya un compromiso por parte de los partidos para asumir el tema», indica Cáceres.
El sector del transporte por carretera defiende que la petición de este título de transporte «no busca favorecer un medio u otro, sino al usuario». Y, delante de la «masiva utilización» de la AP-7, y las restricciones que comportan la aplicación de las Zonas de Bajas Emisiones, creen que debe «potenciarse» el transporte público por carretera. «El enemigo de todo el sistema no es el autobús, sino el turismo, que es el que debería estar en el foco para que no se utilice», argumenta el director general de la Feat.
Un corredor «ferroviario»
Desde el Departament de Territori de la Generalitat de Catalunya se asegura que «ahora mismo no se plantea» la introducción de esta tarjeta dentro de la ATM del Camp de Tarragona, ya que la conexión con Barcelona «es un corredor más ferroviario, no en autobús». Asimismo, se apunta que los viajeros tienen a su disposición la T 10/30, que permite hacer diez viajes en los treinta días consecutivos desde su validación.