La música resuena por las calles de Tarragona y, aunque faltan 15 minutos para que empiece todo, la Plaça del Rei ya está a reventar. Las bolas de paja marcan la línea de seguridad, pero no impiden que la multitud busque el mejor sitio para disfrutar del espectáculo.
#CarnavalTGN | 🥳 Aquest matí s’ha celebrat la XVIII Baixada del Pajaritu, un dels esdeveniments més esperats del Carnaval de Tarragona!
— Tarragona Cultura (@TGNcultura) March 1, 2025
🙌 Organitzada per l’Associació d’Amics de la @JoveDeTarragona, aquesta edició ha comptat amb 16 andròmines participants, que han desafiat la... pic.twitter.com/oeES74OEpe
“Llevamos ya 10 minutos aquí. Los niños querían verlo en primera fila y ya sabemos que se llena muy rápido”, me comenta María Carbonell, disfrazada de ninja, mientras vigila a sus pequeños que suben y bajan de las bolas de paja.
Al aparecer la primera andrómina la emoción se desborda. Uno a uno, los 15 participantes bajan con sus estrafalarias creaciones. Algunos lo hacen acompañados de su equipo corriendo detrás, otros se lanzan en solitario. El público los recibe entre aplausos y chillidos celebrando cada giro, cada trompazo y cada llegada triunfal.
Entre las temática: vacas, aliens, cabrones, palomas, San Fermínes, calçots, entre otras. “La experiencia es siempre muy divertida tanto para los pequeños como para nosotros”, comenta Raul Prats, de la colla Gasparini Club vestido de carbón y con una sonrisa de oreja a oreja.
Al llegar el momento de repartir los premios no faltan los gritos de “¡Tongo, tongo!”. Pero aquí no hay malos rollos, todo el mundo ha venido a pasárselo bien. La mejor bajada es para San Fermines aunque, “no estábamos seguros de estamparnos porque llevamos a niños dentro” confiesa Raquel Lamoga.
Cuando parece que el evento está llegando a su fin, la Xaranga TomaNota hace de la plaza una pista de baile improvisada donde nadie se queda quieto.
