El Camp de Tarragona registra a diario 1,9 millones de desplazamientos por motivos de trabajo. El 90% de estos se producen de forma interna, dentro del propio ámbito, siendo el corredor entre Tarragona y Reus el que tiene más afluencia, llegando a los cerca de 100.000 movimientos al día. Sin embargo, el transporte público tan solo representa el 5,2% de la cuota modal, una cifra totalmente insuficiente que quiere incrementarse notablemente de cara a los próximos años.
El instrumento que debe propiciar este cambio es el futuro Pla Director de Mobilitat del Camp de Tarragona, un documento que se está redactando desde la Generalitat de Catalunya, que ha entrado en la fase de participación ciudadana. «El objetivo es escuchar al territorio y que los municipios nos digan cómo podemos resolver muchas de estas situaciones, teniendo en cuenta que es una zona muy compleja con unas realidades muy diferentes», apuntaba el delegado del Govern en Tarragona, Àngel Xifré.
En total se han organizado cinco talleres que empezaron el pasado martes y culminarán este jueves por la mañana. En estos se ha hablado tanto de la movilidad en bicicleta, como de los territorios con una baja densidad y de los centros de actividad económica.
A modo de ejemplo, en la sesión de ayer por la tarde se abordaba la movilidad relacionada con la actividad turística. En esta participaron tanto operadores de transporte, como profesionales del ámbito turístico y representantes municipales de localidades con una gran afluencia de visitantes, como Vila-seca. También hizo escuchar su voz el alcalde de Perafort, Joan Martí Pla, quien reivindicaba por enésima ocasión unas conexiones decentes para la estación del AVE Camp de Tarragona, que cada año mueve a 1,2 millones de pasajeros. «Los puntos de referencia como las estaciones de tren y el aeropuerto deberían estar incluidos», reivindicaba.
Una encuesta ciudadana
Alrededor de 300 personas habrán participado durante estos tres días en estas sesiones. En paralelo, las personas interesadas todavía tienen hasta el día 31 de diciembre para rellenar la encuesta colgada en el portal participa.gencat.cat.
A partir de ahí, y teniendo en cuenta los datos que se recogieron durante el proceso de diagnosis, el ATM del Camp de Tarragona procederá a la redacción del plan. Según explicó el delegado del Govern, la previsión es que este esté aprobado en 2025. A partir de ahí surgirán una serie de directrices con la vista puesta en el año 2030.
La gerente de la ATM del Camp de Tarragona, Eugènia Domènech, ponía en valor este trabajo que se está produciendo en un momento «cambiante». La incorporación del tranvía, el acuerdo por el traspaso de cercanías, la entrada en funcionamiento del Corredor del Mediterrani, con la futura estación intermodal, así como el fin de las concesiones del transporte público por carretera en 2028 son algunos de los retos.
Según Domènech, el conjunto de estos elementos generan un escenario que «debemos saber aprovechar». Asimismo, el proceso coincide con el inicio de la redacción del Pla Director Urbanístic de l’àmbit metropolità del Camp de Tarragona. «Tenemos muchas cosas que coinciden que son una oportunidad, lo que representa un reto motivador», añadía la gerente del ATM.