Se podría decir casi con total seguridad, que la tarde de de este sábado en la Plaça de la Font no dejó indiferente a ningún ciudadano de Tarragona. Esto se comprobó gracias al gran espectáculo que se generó por la esperada rehabilitación y posterior inauguración de la fachada del ayuntamiento, que permitió que los allí presentes fueran testigos de dos nuevos mappings proyectados. Estos crearon un espectáculo único que generó que decenas de tarraconenses se congregaran delante del edificio para disfrutar de dichas proyecciones sobre la renovada fachada del Palau Municipal, que ha recuperado su color teja original e incorpora ahora un llamativo sistema de iluminación LED de última generación.
Pere Vidal, jubilado de 72 años, recordó con nostalgia cómo la fachada había perdido el esplendor con los años: «Recuerdo cuando esta fachada se veía muy distinta. Ahora está preciosa y este espectáculo es un regalo».
El acto comenzó puntual a las siete de la tarde, ya de noche y con una buena multitud de familias y gente de todas las edades que miraban ansiosos la fachada para empezar a ver las primeras imágenes. Imagínense dicho instante, en el que cientos de caras de sorpresa y curiosidad fijaban sus miradas en el ayuntamiento. Entre toda aquella multitud, se encontraba Marta Garrido, una joven tarraconense que había escuchado el barullo que se había generado y se quedó para ver qué pasaba: «Sé que se iba a hacer una proyección pero no recordaba cuándo. Ha dado la casualidad de que pasaba por la otra calle y al ver tanta gente me he acercado. Me he llevado una grata sorpresa porque ambas proyecciones están muy logradas. Está bien que se hagan cosas así en Tarragona».
Las dos proyecciones incluyeron distintos contenidos, como la construcción del edificio
A través de una coreografía visual que mezclaba elementos geométricos, colores vibrantes y música enérgica, la fachada parecía cobrar vida. Los tarraconenses, mientras, miraban boquiabiertos aquellas luces e imágenes tan llamativas que lograban el que el edificio fuera totalmente mágico. A pesar de que no se trata de una tecnología relativamente reciente, el ambiente que se había generado y ver a todas aquellas personas sorprendidas recordaba a momentos icónicos de la historia, como cuando se realizaron las primeras proyecciones cinematográficas a principios del siglo XX y dicho público miraba asombrado.
Una media hora después, la proyección histórica transportó al público a la época en la que se construyó el edificio, a mediados del siglo XIX. Las imágenes recreaban la construcción del Palau y su evolución a lo largo de los años, generando fuertes aplausos al final.
Las proyecciones se repitieron hasta las 21.30 horas, con gran afluencia de público en cada pase. La nueva iluminación LED quedó encendida después del último mapping, permitiendo a los ciudadanos apreciar los detalles restaurados de la fachada, iluminada con un tono colorido y elegante. Sin duda, un día memorable para la ciudad y un ejemplo de equilibrio entre tradición y modernidad.
