El sindicato CCOO se muestra “preocupado” por los problemas que generará el cierre de la circulación de trenes entre Tarragona y Sant Vicenç de Calders para los usuarios de Tarragona y el Ebre.
El sindicato alerta que más de 15.000 personas utilizan este servicio diariamente, en su mayoría estudiantes, enfermos o trabajadores. Ante la “clara falta de planificación e improvisación de los gestores ferroviarios”, CCOO exige medidas complementarias a las ya anunciadas, así como compensaciones para los viajeros afectados.
El sindicato señala que habría tenido “mucho más sentido” terminar el ramal entre Vila-seca y Castellbisbal antes de cerrar los túneles de Torredembarra y Roda de Berà. Algunos trenes podrían haberse desviado por el nuevo ramal.
Para el sindicato, el plan alternativo propuesto por Renfe y Adif, que incluye cubrir el trayecto suspendido con autobuses, es “insuficiente” y “totalmente improvisado”, ya que “cada día cambian cosas”, y denuncian la falta de información sobre horarios y recorridos. También advierten que las estaciones, especialmente la de Sant Vicenç de Calders, no tienen las infraestructuras adecuadas para gestionar el flujo de viajeros.
El aumento en la duración del trayecto y el temor a posibles incidentes y retrasos, como los ocurridos recientemente, han generado preocupación entre muchas personas por las consecuencias que estos problemas podrían tener en su trabajo. CCOO pide a las administraciones públicas y a las empresas que sean flexibles con los trabajadores que utilizan el servicio, y el sindicato ofrece su apoyo en caso de que surjan problemas laborales.