Eva Llatser es presidenta de la Delegació Territorial del Col·legi Oficial de Pisicologia de Catalunya. La entidad organiza la semana que viene en Tarragona la primera Fira de Piscologia. Uno de los objetivos es mostrar a los ciudadanos qué pueden hacer los profesionales de las salud mental por ellos en cada momento de la vida.
Se habla de una pandemia de salud mental entre los jóvenes. Las nuevas generaciones, ¿son más vulnerables o hablan más?
Ahora se presta mucha más atención en el bienestar de las personas que en generaciones pasadas, pero la sensación que tenemos de que los jóvenes son más vulnerables se basa en el sistema educativo y los valores que los adultos tenemos. Es un tema generacional, siempre parece que las generaciones que vienen están menos preparadas...Por ejemplo, antes había niños trabajando con nueve años y es algo impensable ahora.
El riesgo, entiendo, es que banalicemos su sufrimiento.
Exacto, por eso es importante tener esta sensibilidad. Si para la otra persona es importante, para quien lo escucha tiene que ser importante... Nuestra generación boomer también se queja de que los padres les decían esto o aquello era una tontería. Quiere decir que también teníamos necesidades de salud mental y bienestar emocional.
Justamente para los adolescentes el colegio ha puesto en marcha una serie de eventos anuales que han contado con muchísima asistencia.
Sí, en el último trimestre del año hacemos una jornada que dura toda la mañana. El año pasado hablamos de la autoestima y este año hablaremos sobre la ansiedad que es un tema que está a la orden del día.
Las redes sociales que ven los más jóvenes están inundadas de contenidos con autodiagnósticos de salud mental. ¿Cómo se puede atajar?
Con muchísima información, pero de la correcta... A los jóvenes tenemos que enseñarles a usar estos instrumentos de forma correcta y a saber discernir qué es lo que les puede ayudar y qué es lo que no... Y, si tenemos cuestionamientos acudir al profesional, en este caso de la psicología.
Pero, ¿tenemos suficientes psicólogos? En los CAP hay ahora proyectos de psicología comunitaria.
Es un primer paso y todo primer paso es bueno, pero no es suficiente. La masa poblacional es elevada y los grupos de bienestar emocional que se están haciendo no llegan a todos. Aparte, en las consultas que se realizan desde el ámbito de la sanidad pública, las listas de espera son largas. Entre sesión y sesión lo habitual son dos meses y eso no favorece una intervención terapéutica adecuada.
Al menos el número de psicólogos debería aumentar. La demanda de alumnos que quieren estudiar psicología crece.
Sí, se están formando más profesionales de salud mental, pero de lo que se tratará es de darles salidas profesionales; de hacer que el sistema público de salud ofrezca una cobertura adecuada.
Hay personas con pocos ingresos, inmigrantes recién llegados, mayores con pensiones bajas... Que ni se plantean ir a un psicólogo porque no lo pueden pagar. La psicología actualmente es un lujo y no llega a todas las personas que debería llegar. Hay iniciativas que salen de asociaciones, de entidades, incluso de fundaciones. Un ejemplo es la Psico Xarxa solidaria del colegio, que ofrece atención a las personas con pocos recursos. Lo importante sería que a nivel político haya una implicación real para que se pongan los recursos económicos que hacen falta.
Hablamos mucho de jóvenes pero a los más mayores ¿les cuesta ir al psicólogo?
Las cosas comienzan a cambiar; tal vez porque tienen aquel nieto que ha hablado del tema están más abiertas... Aunque como decíamos al principio, son generaciones que tienen otros recursos y lo gestionan de otra manera. Sufren más en silencio pero no quiere decir que no necesiten ayuda. Haría mucha falta que en los grupos de apoyo emocional también hubiera para gente mayor.