El jurado popular –por unanimidad– declaró el pasado martes a última hora de la tarde la culpabilidad del hombre acusado de asesinato por matar con un cuchillo al amante de su ex mujer en Vila-seca en agosto de 2020. El tribunal consideró probado que el acusado entró en la vivienda donde dormía la pareja (víctima y su exmujer) con dos cuchillos y guantes y propinó varias puñaladas a la víctima, que le causaron la muerte, sin que este se pudiera defenderse.
El jurado popular aprobó por unanimidad todos los puntos del veredicto, excepto el que indicaba que la víctima se hubiera podido defender ante la agresión del acusado. En este caso, ocho de los nueve miembros votaron a favor de que la víctima no se pudo defender.
Así mismo, el tribunal ha considerado probado que el acusado se desplazó desde Barcelona a Vila-seca el día que se cometió el crimen, que compró los cuchillos y los guantes en establecimientos de la zona y que esperó el momento «oportuno» para entrar sin permiso del propietario al domicilio, donde dormían la expareja del acusado y la víctima.
Los miembros del jurado también consideraron probado que el acusado había consumido canabis y cocaína durante los siete meses anteriores a los hechos, pero han sostenido que este consumo solo le disminuyó de forma «leve» su capacidad de discernir entre el bien y mal. Además, también declararon que las diversas heridas por arma blanca propinadas por el acusado en el tórax y abdomen fueron las causantes de la muerte.
El ministerio fiscal ha pedido una pena de prisión de 18 años por el delito de asesinato y de allanamiento de morada.
El abogado de la acusación particular destacó que han hecho un «esfuerzo considerable» para rebajar la petición inicial de 25 a 20 años de prisión. La acusación particular también ha requerido la misma indemnización de responsabilidad civil que la fiscalía.
La defensa que pedía la absolución al inicio del juicio, ha solicitado tras el veredicto del jurado una pena de 7,5 años por el delito de asesinato y tres meses por el allanamiento de morada.
Su abogado ha rechazado la declaración de culpabilidad del jurado popular y ha requerido que se tengan en cuenta, como atenuantes, el hecho que su cliente confesara el crimen, así como que lo cometió por la circunstancia de una «profunda ofuscación» a raíz de la separación con su mujer y por el hecho que descubrió que ella mantenía una relación sentimental con su amigo.