Los Mossos d’Esquadra han abierto diligencias penales a un conductor por circular por la autopista AP-7, en L’Aldea, con una tasa de alcohol que triplicaba el límite permitido.
Los hechos se remontan a la madrugada de este miércoles. Agentes del sector de Trànsit de Tortosa de la Policía catalana, a la una y media de la madrugada, había montado un control de velocidad a la altura del punto kilométrico 319.
A la 1.46 horas, el aparado de radar se disparó al paso de un turismo que circulaba a 146 kilómetros por hora. Poco después, el conductor fue interceptado por una patrulla para notificarle la sanción. Los agentes notaron que desprendía una fuerte halitosis a alcohol, acompañado de sintomatología.
Cuando el conductor realizó la prueba de alcoholemia, dio una tasa de 0,86, cuando el límite es 0,30. Se trata de un ciudadano ucraniano de 49 años y con domicilio en Alacant. El vehículo fue inmovilizado a la espera de que el hombre diese negativo en la prueba.
El exceso de velocidad comporta una sanción económica de 100 euros, mientras que la pena por la alcoholemia es de retirada del carnet entre uno y cuatro años y una multa.