Los eventos feriales de Reus, el Baix Camp y el Priorat recuperan la presencialidad. En Reus, hace meses que volvió la Fira de l’Oli; el viernes, el sábado y el domingo de la semana que viene lo hará la Reus Viu el Vi; y, más adelante, del 8 al 12 de octubre, será el turno de la feria multisectorial exproReus, situada en las instalaciones de firaReus.
Riudecanyes acogerá este sábado, por otro lado, la Fira Tastaverd y los habitantes del Priorat verán finalizar la Fira del Vi de Falset, que culminará su programación de visitas en las bodegas participantes de la feria –esta volvió a ser presencial del 29 de abril al 1 de mayo–. «Hacemos un balance positivo de las visitas hechas en las bodegas. La Fira del Vi de Falset presencial fue un éxito, batimos récord de visitantes y de venta de tiques para catas. Volver a hacer la feria presencial, provocó, también, que la afluencia en las bodegas no fuera como la del año pasado y se comprende; antes no había más presencialidad que esa», comenta el alcalde de Falset, Carlos Brull.
La cifra de entradas compradas para hacer las visitas, cerrada anteayer mismo, es de «541 catas». De cara al año que viene, «las mantendremos, aunque con algún replanteamiento, puesto que se concibieron por la Covid, en tiempo de restricciones». Como al acabar la feria acostumbran a recoger las impresiones de los viticultores y demás participantes, «vamos ajustando el evento a sus necesidades». Volviendo al Baix Camp, una de las ferias de referencia en su capital y que, como decíamos, está a la vuelta de la esquina es la Reus Viu el Vi, que celebra la vuelta a la presencialidad con su décimo segunda edición a finales de la semana que viene en la plaza de La Llibertat.
En el evento, estarán presentes las denominaciones de origen (DO) de la demarcación del ente cameral, es decir, la DO Catalunya, la DO Conca de Barberà, la DO Montsant, la DOQ Priorat, la DO Tarragona, la DO Terra Alta y la DO Cava. La feria ya cuenta con cartel, hay actos previos realizados y se presentará de forma inminente; acogerá, además, la tercera muestra de vermut de Reus. «Será una edición especial teniendo en cuenta la carga emotiva que lleva implícita. Desde el 2009, la Reus Viu el Vi se había realizado ininterrumpidamente cada año», remarca el presidente de la Cambra de Comerç de Reus, Jordi Just. Recuerda que «teníamos la feria preparada para junio de 2020, con todos los espacios contratados y el estallido de la pandemia nos obligó a aplazarla», recuerda.
El año pasado «intentamos hacerla, excepcionalmente, en octubre, agotamos en un tiempo récord las inscripciones de los estands, pero al final fue imposible realizarla; podemos decir que a la tercera va la vencida». La respuesta de las bodegas «ha sido, de nuevo, entusiasta», dice.
Señala que, «durante esta legislatura», tenían como objetivo «introducir cambios» en la feria, «sin que esta perdiera su esencia, buscábamos ir más allá, para satisfacer aun más las expectativas de las bodegas y las de los clientes», cuenta. La pandemia «ha alterado estas previsiones y, por ello, mantenemos el modelo clásico, con el deseo de poder introducir estos cambios, progresivamente, a partir del año 2023». Esperan «una afluencia masiva», tomando como referencia la ya mencionada Fira de Falset.
Los productores
Algunos de los productores, por su parte, están «emocionados». La presidenta de la DO Montsant, Pilar Just, explica que ferias como la Reus Viu el Vi «ayudan a volver a la rueda de la difusión y promoción de vinos del territorio». «Volver a tener ferias presenciales significa recuperar el ritmo de 2019 y queda mucho por hacer. Las bodegas tienen que recuperar el ritmo de entonces y las ferias son el punto de partida; con lo que empezamos a trabajar en la viabilidad económica de los negocios y potenciar la viticultura a partir de ahí». Más allá de los días de feria, continua, «debería potenciarse aun más la cultura del vino en el territorio».
El presidente de la DO Terra Alta, Joan Arrufí, manifiesta que la Reus Viu el Vi se trata de un «proyecto vivo y consolidado». «Hemos pasado por las restricciones y parece ser que se están dejando atrás», apunta. Opina que a nivel relacional, la comunicación a distancia permanecerá. «La Covid ha aumentado las formas que hay de comunicarse y acorta distancias entre países», contempla. Los productores echaban de menos el contacto humano: «Dar a conocer el producto en persona y contextualizar sus orígenes es clave».
El secretario de la DO Catalunya, Anton Castellà, declara que «volver a la feria presencial es positivo». Describe que fueron útiles las catas virtuales, pero «al final lo interesante es compartir». Encuentra la Reus Viu el vi el evento «más multitudinario de la ciudad, que reúne a muchos actores de proximidad». También expone que los calendarios de las DO, más allá de las ferias, «comienzan a volver a la normalidad, con más eventos y patrocinios», concreta.
Más adelante, se llevará a cabo la feria de muestras exproReus, que llegará este año a su 50ª edición. Un evento que ya por la efeméride, indica el gerente de REDESSA, Albert Boronat, «es especial y queremos darle el valor que merece, con cambios que haremos públicos más adelante». Avanza que «la entrada será gratuita, al igual que en la Fira de la Moto y lo será, también, en Tot Nuvis», señala.
Y es que quieren «reactivar el sector con eventos como este, que tienen un impacto económico en el territorio», remarca. Potenciarán las nuevas tecnologías, además: «Es algo que ya empezábamos a trabajar, pero que antes no era tan visible; en tiempos de pandemia, las tecnologías han tenido un papel crucial, estudiamos qué formatos poner en marcha, para que sea todo más experiencial». La actividad ferial ya funciona «a pleno rendimiento, aunque por muchos eventos híbridos que organicemos, vemos que la gente prefiere asistir en persona», constata.
