Sara Ould y Rosa Maria Pla son dos emprendedoras en dos puntos muy distintos de su trayectoria: la primera «empieza ahora» y la segunda cuenta con un proyecto iniciado ya. Ambas han recibido ayuda del Servei d’Assessorament a l’Empresa i l’Emprenedoria. «El servicio de acompañamiento municipal, que apoya a la creación de unanueva empresa, lo descubrí por redes sociales. Estaba implicada, también, en el proyecto de Reus Espais Vius (acción que impulsa la ocupación de locales vacíos en los arrabales de Reus y su entorno) y pensé que sería una buena opción para asesorarme. Acabo de empezar a emprender y lo veo toda una oportunidad», cuenta Ould. La experiencia fue «necesaria» y exponer su idea delante de varios profesionales la hizo reflexionar: «Me plantearon posibles problemas, otros puntos de vista e incluso tener en cuenta el aspecto emocional con una idea que estuviera conectada con mi esencia, eso me ayudó a reformular posibles flaquezas». Ould plantea la creación de un híbrido entre cafetería y espacio de cotrabajo (coworking), en el que «alquilar por horas, con flexibilidad, y para todos los públicos».
Pla ha participado en distintos momentos en el itinerario de asesoramiento y, a día de hoy, colidera un proyecto llamado Haru –nombre de mujer en japonés que significa ‘primavera’– y que está relacionado con el tiro con arco. «A mi pareja y a mí, nos inspiró una novela llamada Haru para crear el proyecto. Trataba de una chica, que a través del tiro con arco, hace un recorrido de vida y de mejora personal. Atendemos a escuelas y hacemos actividades extraescolares. Hemos vuelto a abrir las puertas que cerramos por la pandemia», resume Pla, quien se ha reformulado laboralmente y «he aprendido de los cambios».
El tiro con arco es para la emprendedora algo que «va más allá del deporte». «Se trata de meditación en movimiento. Anteriormente, me había dedicado a la gestión como asalariada y al enterarme del programa del servicio de asesoramiento, pude profundizar en temas jurídicos, de marketing y comunicación, que me han ayudado mucho».
El concejal de Empresa i Ocupació, Carles Prats, distingue que han ganado «mucho» al unificar los servicios que ofrecen a empresas en el espacio del antiguo hospital: «Permite que proyectos como el servicio de asesoramiento y Reus Espais Vius, conecten y se retroalimenten». «Los técnicos que se encargan de estos servicios comparten información y se genera una comunicación muy activa, que revierte en los emprendedores», añade el edil.
