El Instituto Nacional de Estadística (INE) calcula que, en Reus, hay 5.904 viviendas vacías, según el consumo eléctrico en un año completo. La cifra representa alrededor de un 10% del parque total, un porcentaje inferior a la media española (14,4%) y de la provincia (más del 15%). También se sitúa por debajo respecto 2011, cuando el INE calculaba que un 13% de las viviendas de Reus estaban desocupadas. La cifra, aunque baja en comparación con otros municipios, dista mucho de las que maneja el propio Ayuntamiento de Reus, que calcula 1.380 viviendas vacías, de las cuales 480 serían de grandes tenedores y, el resto, de particulares, según el Pla Local d’Habitatge.
Mientras las instituciones trabajan para unificar criterios y métodos de recopilación de datos, la falta de vivienda persiste «y se demuestra que el problema no es que falte vivienda», exclaman desde el Sindicat d’Habitatge de Reus, que añaden: «Tenemos que ser capaces de recuperar vivienda del mercado privado de forma definitiva». «Si todas las que están vacías, se movilizaran, no habría problemas de vivienda», subraya también Sandra Casanova, miembra de la Platafora de Afectados por la Hipoteca (PAH), quien reclama que «Generalitat se ponga las pilas y multe a los propietarios de pisos vacíos».
Recuperar estas viviendas requiere de la implicación de empresas privadas, particulares e instituciones, también a nivel municipal. Fuentes consultadas recuerdan que éste es uno de los objetivos del Ayuntamiento de Reus y así queda plasmado tanto en el Pla Local d’Habitatge como en el Pla d’Acció Municipal.
En el Pla Local d’Habitatge se prevén acciones como la creación de convenios con grandes tenedores, así como explorar la posibilidad de que particulares cedan viviendas y edificios al Ayuntamiento. Todo con el objetivo de adquirir pisos para ampliar el parque de alquiler asequible. En el Pla d’Acció Municipal hay previstas más líneas de actuación para los próximos cuatro años, como elaborar un plan de inspección de viviendas desocupadas. En paralelo, el Ayuntamiento plantea un programa municipal de ayudas a la rehabilitación de inmuebles de particulares para, después, ponerlos a disposición de la Borsa de Lloguer de Reus.
La intervención en bloques del barrio Fortuny prevista para 2024 también tiene el objetivo de promover la dinamización de pisos vacíos, así como la reordenación urbana del Carme, con la futura construcción del nuevo CAP, viviendas y parking subterráneo. En este último caso, cabe recordar que a nivel de barrio ya se ha hecho un importante trabajo: la asociación vecinal ha impulsado la reforma de viviendas a través de contactos con posibles interesados a invertir. Esfuerzos que han dado frutos.
Ciudad tensionada
Reus está declarada por la Generalitat como área tensionada en cuanto al acceso a la vivienda. Un problema que el Sindicat d’Habitatge relaciona también con este parque de vivienda vacío que «sigue creciendo» y que «mantener una burbuja artificial de precios cada vez más inaccesible para la clase trabajadora», denuncian. Además, dejan claro que, bajo su punto de vista, «la solución no pasa por construir nueva vivienda», sino recuperar la vacía y que ésta esté «en condiciones», añade por su lado la PAH.
¿Cuándo considera el INE que una vivienda está vacía?
El Instituto Nacional de Estadística –organismo oficial español– recuenta el número de viviendas vacías en base al consumo eléctrico en un año. Según el propio INE, se considera ‘vivienda vacía’ «aquella que no dispone de contrato de suministro eléctrico» y también las que «el consumo total registrado ha sido menor al que una vivienda media de ese mismo municipio tendría si se ocupara durante 15 días en todo el año». En cuanto al Ayuntamiento de Reus, en el Pla Local d’Habitatge se indica que las viviendas vacías de grandes tenedores son en base al registro de la Agència d’Habitatge de Catalunya, mientras que los de particulares, según datos del departamento de riendas del Ayuntamiento.
