El pasado martes, la escultura del Gaudí nen de la calle Amargura se descubrieron una serie de grafitis rosados que ensuciaban esta obra de Artur Aldomà. No ha sido el primer acto vandálico de esta escultura, que fue restaurado y recolocado en verano de 2022.
En esta ocasión el vandalismo se ha registrado en la plaza del Mercadal, en pleno corazón de la ciudad de Reus. Un grafitero decidió inmortalizar su trazo esta madrugada de viernes en una de las carpas preparadas para la fiesta de Sant Jordi.
El Ayuntamiento se gasta 370.000 euros cada año para reparar actos de vandalismo
El joven fue captado por las cámaras de videovigilancia y esas imágenes están en posesión de la Guàrdia Urbana de Reus que intenta identificar al autor de este acto vandálico. Además de sus rasgos y vestimenta, el trazo también podría aportar pistas de su autoría y relacionarlo con otros grafitis documentados por la propia Guàrdia Urbana.
El Ayuntamiento de Reus tiene estipulado en la ordenanza municipal de incivismo una sanción económica de hasta 1.200 euros para «pintadas no autorizadas en fachadas de edificios públicos o privados». Y el alcalde Carles Pellicer ha aprovechado lo ocurrido para remarcar que el responsable de este acto incívico «lo localizaremos, lo identificaremos y se le impondrá el castigo que se merece».
Reus destina una partida económica de 370.000 euros anuales en la reparación y mantenimiento de desperfectos causados por el vandalismo (como el de la escultura del Gaudí Nen, por ejemplo) y según fuentes municipales, levanta unas 4.000 actas por actos incívicos registrados en la capital del Baix Camp.