Lunes. El presidente del Tribunal Constitucional (TC), Pedro González-Trevijano, y el magistrado Antonio Narváez, se autovotan para impedir la recusación presentada contra ellos. No se consideran parciales en una decisión sobre ellos mismos, cuando la Ley Orgánica del Poder Judicial establece como una de las causas de abstención y, en su caso, de recusación, «tener interés directo o indirecto en el pleito o causa».
Pese a que la votación es decisiva sobre su propio futuro, argumentan que su posicionamiento no responde a intereses directos o particulares que pudieran derivarse de su recusación. Ambos jueces tienen su mandato caducado y, de seguir adelante la reforma sobre la que deben pronunciarse, tendrían que ser sustituidos por nuevos magistrados.
Al final, sus votos son determinantes para paralizar la enmienda del Gobierno destinada a desbloquear la renovación del Poder Judicial y del Constitucional. La dignidad cotiza a la baja entre la alta magistratura.
Martes. Crisis institucional sin precedentes por la decisión del TC de prohibir el debate sobre la reforma judicial en el Senado. Las acusaciones cruzadas entre el Gobierno y los grupos que apoyan sus medidas de desbloqueo, por un lado, y los partidos de la derecha decididos a frenar la reforma, por otro, se instalan en la retórica guerracivilista. La dignidad cotiza a la baja en las más altas esferas políticas.
Bronca permanente
Miércoles. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se somete a las sesiones de control en el Congreso, por la mañana, y en el Senado, por la tarde, donde mantiene un bronco cara a cara con el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo. Las acusaciones gruesas y los insultos siguen monopolizando los enfrentamientos entre el bloque de la investidura y el de la derecha. La dignidad cotiza a la baja en ambas Cámaras.
Jueves. El pleno del Senado aprueba la supresión del delito de sedición y su reconversión en delito de desórdenes públicos agravados. El Código Penal también rebaja las penas por malversación cuando no hay lucro personal. Los reproches sobre las motivaciones de los unos y las estrategias de los otros son de sobras conocidos.
Esa misma mañana, en el pleno del Ayuntamiento de Reus, la concejal Carmina Pozuelo Blanco (PSC), que desde hace años batalla contra el cáncer, interviene telemáticamente desde una cama del hospital. Reproduzco íntegramente sus palabras:
«Estoy en un momento delicado para la salud y me gustaría decir unas palabras al pleno. Vengo de una familia muy humilde, de Cuenca. Mi padre era pastor y estoy muy orgullosa de ello. Mi madre vino de sirvienta con 12 años a cuidar a un niño de una familia bien de Reus y ha trabajado toda su vida. Lo que me han enseñado es a ser trabajadora, coherente y buena persona.
Para una persona como yo, haber llegado a ser regidora, que no me lo hubiera imaginado nunca, ha sido un honor. Creo que los que me conocen saben que he trabajado como una hormiga, siempre he intentado aportar, siempre he tenido mi coherencia y mi voluntad.
Quería dar las gracias también a las dos personas que me pusieron en la lista, Francesc Vallès y Andreu Martín, que confiaron en mi y creo que no les he decepcionado. Y al partido y a la agrupación, que siempre me han apoyado. Y a mucha gente de fuera que siempre también me apoyó. Muchas gracias».
Todo el pleno le dedica un emocionado aplauso. Pozuelo era autónoma y regentaba una tienda de comestibles antes que la enfermedad le impidiera continuar con su trabajo. La dignidad en la política asoma en Reus.
Viernes. Las portadas de la prensa nacional hacen balance de una semana de máxima tensión. «ERC aplaude la entrega del PSOE: ‘los pilares del 78 se tambalean’», titula El Mundo. «El Gordo de corruptos y separatistas», editorializa La Razón.
«La rebaja de la malversación vaticina una oleada de revisiones como en el ‘si es si’», dice ABC. «El bloque de investidura saca unido las leyes más polémicas», concluye El País. «Feijóo denuncia un plan para la consulta catalana mientras Sánchez cree que un PP agresivo le beneficia», resume La Vanguardia. «Sánchez posa el conflicte català al congelador», considera Ara...
El poeta y periodista Antonio Lucas escribe en El Mundo que «la sensación general es que entre la política y la prensa están haciendo de nuevo rehenes y antes o después habrá que volver a purgar los errores cometidos en nuestro nombre».