Los negocios de la periferia de Reus, participantes en la campaña de Bons Reus, han visto revitalizadas sus ventas con la puesta en marcha de otra edición de la campaña, surgida originalmente por la llegada de la Covid. Más allá de contribuir con el comercio local del casco antiguo, algunos de los establecimientos participantes más allá del Tomb de Ravals han visto que adherirse a la propuesta tiene sus ventajas y «muchos de los clientes de siempre, acuden a gastar los bonos en su negocio de confianza».
Los vecinos encuentran «positivo» que el foco de «las compras se descentralice» y que la ciudadanía «tenga en cuenta que pueden utilizarlos en los comercios que tienen al lado de casa, esa es la esencia de los bonos, estar al lado de la proximidad». Esto mismo cree la presidenta de la asociación de vecinos del barrio de La Pastoreta, Puri Flores, quien observa que «la clave es que el Ayuntamiento informe a los comercios más alejados de los Bons Reus, porque si funcionan en el centro, lo harán en los barrios menos céntricos». La presidenta de la entidad apunta que, para que los negocios se animasen a participar, uno de los puntos de interés «estaría tener garantizado el pago de esos descuentos, recibir la cantidad a su tiempo siempre es un incentivo». El éxito de la iniciativa ha sido tal, le consta a Flores, que «muchos vecinos se han quedado sin bonos, la velocidad de descarga es alta». Y es que es habitual que, las diferentes convocatorias, en menos de 48 horas, los descuentos se hayan agotado.
«Encontramos muy bien que los bonos se los puedan descargar residentes y visitantes, pero, en numerosas ocasiones, con lo que nos encontramos es que, hay gente mayor, vecina de Reus, que, por no saber cómo descargarse los bonos por la web, no los consigue a tiempo, y tarda porque necesitan ayuda», destaca. Una forma de evitarlo «sería que, en una de las dos convocatorias que se realizan al año, se implantara algún tipo de beneficio para los residentes, por ejemplo».
Comprar productos extra
En el barrio de La Pastoreta, añade la representante vecinal, los bonos impulsan las compras extra, también. «En nuestra zona, sobre todo hay peluquerías apuntadas a la campaña y la clientela, al tener bonos, además del servicio de peluquería, se animan comprando un producto extra para el cabello, es decir, estos descuentos invitan a comprar más», resume Flores.
Todo esto lo corrobora la emprendedora Pili Arenas, al frente del centro capilar y de estética oncológica que lleva su mismo nombre. «Las clientas que han venido a gastar bonos en mi establecimiento han sido las habituales, nuevas no me han venido. Los negocios notamos cómo se dinamizan las ventas con esta iniciativa. Yo, menos las primeras ediciones, he participado en todas y hago un balance positivo, a mí me ayuda mucho», asegura Arenas.
El sistema para validar los descuentos, además, «ha ido mejorando a lo largo de las diferentes ediciones y creemos que funciona adecuadamente en el comercio y en los negocios de servicios, porque beneficia de forma bidireccional». Como Flores, Arenas coincide con que a menudo los bonos se agotan rápido: «Mucha gente se queda sin bonos al salir estos a descarga, o deberían de ponerse más a circulación o tendrían que repartirse los tiempos».
En otro rincón de la ciudad, en el barrio de La Mineta, está también Glòria Figueras, de la tienda de ropa Blaugab, que comercializa piezas de algodón orgánico, sin tóxicos y de comercio justo, así como con certificados de normas textiles orgánicas globales. «Nosotros estamos muy contentos cuando llegan los bonos. Arrasan y la gente los espera. Esta última temporada vino una familia de Barcelona a la tienda y se los descargaron al límite de tiempo, no sabían cómo hacerlo y los ayudé, pudiendo usarlos todos», explica la comerciante.
Además, la campaña «beneficia a los comercios que estamos más alejados» del Tomb de Ravals y «como consumidora de estos descuentos y comerciante, encuentro que son una ayuda, que hace que el cliente venga a comprar a la tienda física y no solo compre por internet».
Otras iniciativas
La campaña municipal Bons Reus se originó, como decíamos, en el marco de la reactivación del comercio, los servicios y la hostalería tras llegar la Covid, y ha venido para quedarse. Paralelamente, las asociaciones comerciales siguen montando iniciativas que contribuyen a dinamizar las ventas de los establecimientos asociados. La más reciente fue la Festa de la Primavera, del área el Tomb de Reus, este pasado viernes y sábado, en la que colaboraron las concejalías de Promoció de Ciutat y la de Empresa i Ocupació del Ayuntamiento de Reus. El objetivo del proyecto fue potenciar la oferta de comercios, restauración y negocios de belleza y servicios, junto con espectáculos de calle y sorteos. La Unió de Botiguers, por su parte, además de crear el sistema de fidelización Targeta Gaudim -mediante la que se acumula saldo virtual y se aplican descuentos-, también han montado varios sorteos para incentivar las compras.
euros es el total de la inversión prevista por el consistorio en la campaña comercial de Bons Reus de esta temporada
