«Dejé mi profesión en el campo de la sanidad y me dediqué a la pastelería creativa, hasta entonces, mi afición. Ahora se ha convertido en mi trabajo, es algo que está muy de moda en bodas y otros eventos. Al principio, tenía miedo, no había hecho nunca nada así y me apunté al Servei d’Assessorament a l’Empresa i l’Emprenedoria de la concejalía de Empresa, Formació i Ocupació del Ayuntamiento de Reus. Me sirvió de guía», resume su experiencia Noelia González, quien fundó Dulces Creaciones Pastisseria Creativa. El negocio cuenta con una parte de escuela, «hacemos talleres para adultos y niños». A día de hoy, asegura González, «me fue útil el curso de incubación empresarial en los inicios» y cuando ha necesitado una ayuda económica, «me han informado de cómo optar a una». La formación la encuentra «indispensable»: «No solo te dan herramientas y estrategias para llevar tu negocio, sino que ganas en seguridad». La repostera cuenta con tienda física y tiene una persona a media jornada, puesto que «ahora mi objetivo es crecer». Ya ha pasado un año desde la creación de su negocio, con lo que «este 2024 es decisivo» y para ello, «necesitaba una persona más».
Ayuda con la burocracia
La emprendedora Esther Prats coincide con González respecto a la utilidad del servicio y explica que junto a su hija, Júlia Cassadó, decidieron embarcarse en una aventura que hizo surgir L’Entresol: «Me había dedicado desde siempre al periodismo institucional y hace un año y medio decidí hacer un cambio drástico en mi vida y convertir un hobby, el de las manualidades y el scrapbooking, en un negocio». Así pues, montaron juntas el negocio en el que ofrecen, entre otras cosas, talleres monográficos, continuos y para niños como actividad extraescolar. «Tuvimos claro que, antes de hacer cualquier cosa, preguntaríamos al Ayuntamiento y, desde allí, ya nos ayudarían».
Prats sabía que «se ofrecen muchos servicios desde la administración» y a nivel burocrático, «este servicio dirigido al emprendedor, ubicado en el antiguo hospital, nos ayudó mucho, incluso a la hora de mirar si las condiciones del local que eligiéramos eran aptas para la actividad que queríamos llevar a cabo». Comenzaron oficialmente en octubre de 2023 y «estamos satisfechas, no tenemos colas, pero nos viene gente de todos lados». Los talleres «sirven para desconectar y quien viene, a menudo, se sorprende a sí mismo de lo que es capaz de hacer».
Sílvia Lozano y Anna Tió son dos emprendedoras al frente del estudio multidisciplinario Cultura de Taller. Son usuarias del servicio y constatan que, «a pesar de estar activas desde 2012, lo que nos llevó a contactar finalmente fue que no sabíamos sacar rendimiento de algunos aspectos de la empresa». «Nos llegaban proyectos importantes, pero no sabíamos cómo difundir todo eso y el servicio nos ofrecía herramientas que nosotras no teníamos. Lo descubrimos por redes sociales», declaran. Cultura de Taller aborda «desde imagen corporativa, interiores y arquitectura efímera hasta temas artísticos», pero lo cierto –dice Lozano– es que, «por muy acotado que tengas el negocio, al igual que la vida, evolucionará y eso requiere de un asesoramiento». Añade que «detrás de una empresa hay una historia, pues es un proyecto de vida».
La mejor política a aplicar
Tió complementa a su socia: «Si eres emprendedora, muchas veces te tocará afrontar cosas en solitario, solo podrá entenderte otra autónoma; quien trabaja por cuenta ajena, normalmente te aconsejará que si no tienes beneficios, cierres y listo». González tercia que «eso es lo que nos une a todas, da igual en qué momento te encuentres con la empresa, siempre hay algo de soledad y alivia saber que hay un equipo ahí para ayudarte a mejorar».
El concejal de Empresa, Formació i Ocupació, Òscar Subirats, destaca, por su parte, que «el emprendimiento es una rama principal de la concejalía, vehiculada con este servicio, que acompaña en los inicios y los dos primeros años». «Ajustamos una idea a la realidad, asesoramos y acompañamos con sesiones formativas, ya sean cápsulas o cursos más enfocados a la actividad económica», destaca el edil. Todas estas acciones, «también se centralizan a través de ayudas, que apuestan por consolidar una empresa». Es decir, «asesoramos, formamos, acompañamos y ofrecemos ayudas». «Esto permite mantener el crecimiento económico, pues la ocupación es la mejor política social a aplicar», cuenta Subirats.
La técnica del Servei d’Assessorament a l’Empresa i l’Emprenedoria, Cèlia Bermúdez, aporta que «nosotros atendemos casos muy diferentes entre sí y hay gran presencia femenina». Tras el primer asesoramiento, «adaptamos el plan a sus necesidades». La clave es que «un negocio tenga una idea lo más definida posible, porque el camino del emprendimiento es bonito, pero duro». Este 2024, en el servicio, se están asesorando entre 10 y 15 empresas, y de estas hacen seguimiento; y, en 2023, asesoraron alrededor de 200. El acompañamiento no se detiene al inaugurarse el negocio, sino que «vemos la vida que tiene este y cómo sortea inconvenientes». En materia de subvenciones, «con este servicio, los emprendedores nos ponen cara, somos quienes filtramos los proyectos y es algo que nos tomamos muy en serio».
