Un total de 206 establecimientos han recibido y emplean los nuevos contenedores del sistema de recogida comercial puerta a puerta. De estos, con cifras del Ayuntamiento, 60 se corresponden con negocios del núcleo. La mayoría son bares y restaurantes.
En total, se han entregado ya unos 440 cubos de diferentes medidas: 90, 120, 240 o 360 litros. Por fracciones, destacan el vidrio y la orgánica, con 140 y 108 depósitos cada una, y también los envases, para los que se han repartido 90 unidades.
El concejal de Medi Ambient, Daniel Rubio, explica que «el número de locales que utilizan el puerta a puerta comercial ha crecido exponencialmente en el último año». La actualización y expansión del servicio, que venía funcionando desde años atrás aunque de forma «algo desordenada» y con mayor incidencia en los polígonos, coincidió con el desmantelamiento de la basura soterrada del centro, que se inició en el Mercadal tras quejas por olores y plagas y avanza radialmente.
Consultado sobre los resultados del modelo, el vicepresidente del Gremi de Restauradors de Reus, Víctor Perales, expresa que «el mecanismo es el mismo que ya teníamos y va bien: hay unos horarios en los que vienen a buscar el vidrio, el cartón, la orgánica...».
En el nuevo contexto, «están apretando para que no saquemos los contenedores cada día, sino que guardemos los residuos dentro del local. Pero eso no lo queremos; queremos que sigan pasando diariamente», añade, porque «si no lo hacen así, ocurrirá que cada uno se buscará la vida para poder tirar la basura».
Con identificación TAG
Los depósitos cuentan ahora con un sistema de reconocimiento con TAG, que «es una identificación ligada a la incorporación de unos camiones específicos que llegarán a principios de año y que permitirán saber quién genera la basura y pesarla», señala Rubio. Pese a que los vehículos todavía no estén en marcha, los TAG ya vienen instalados y «el inspector puede leerlos con un aparato similar a un móvil».
Por su parte, Perales recuerda que «los viejos contenedores ya se pusieron en su día con chip, pero pronto dejaron de funcionar y no se les dio más salida». Y valora positivamente el hecho de que los cubos «ahora se cierran con llave». «Está muy bien porque nos encontrábamos con que algunos vecinos o quien pasase por ahí tiraba su basura dentro; y ya no se puede».
Mientras la entrada en funcionamiento del TAG se completa, los contenedores se han identificado con los nombres de los establecimientos en adhesivos. El concejal de Medi Ambient precisa que «eso también ayuda a que estén en su sitio y no aparezcan lejos del local al que se han asignado».
Al recibir los contenedores, a los negocios se les ofrece también formación en separación de residuos
La ecotasa en la que el Ayuntamiento trabajará para la basura doméstica, orientada a que quien recicle más pueda pagar menos, se extenderá también al puerta a puerta comercial. En este sentido, el vicepresidente del Gremi de Restauradors de Reus pide «que el recibo se ajuste más a la realidad», ya que actualmente «casi todos pagamos alrededor de 1.000 o 1.200 euros al año, generemos más o menos basura, porque el cálculo se hace en base a la superficie».
Los nuevos contenedores se entregan con el acompañamiento de «dos formadores ambientales y la empresa ReusNet», que gestiona la nueva contrata de basuras, tal como detalla Rubio. Los establecimientos «reciben una primera visita en la que se analizan los residuos que generan y se dimensionan los volúmenes de contenedores que necesitan», señala.
Los formadores «también informan al establecimiento sobre la correcta separación de residuos» y «si se detecta una falta de buena selección en algún negocio, se ofrece formación a los trabajadores sobre sensibilización ambiental, totalmente gratuita y en el horario que más se adapte».
Pese a que la renovación de depósitos aceleró a partir de mayo del año pasado, no todos los que emplearían el puerta a puerta han recibido aún sus contenedores. «La estructura comercial de Reus es muy viva y seguro que quedan establecimientos que se quieren adherir al sistema, pero estamos muy satisfechos del despliegue que se ha hecho hasta el momento», especifica el concejal.
Rubio apunta que «los formadores visitan nuevas altas de establecimientos con mensajes de concienciación ambiental y aclaran dudas que puedan aparecer sobre el servicio municipal de recogida de desechos».
El puerta a puerta comercial lleva prestando servicio desde hace muchos años y el Ayuntamiento detalla que «continuamente incorporamos puntos de recogida con el objetivo siempre de mejorar la atención a las empresas y los índices de recogida selectiva de la ciudad, que prevemos que superen el 40% en 2022».
El alcalde de Reus, Carles Pellicer, considera que «el despliegue del nuevo servicio de limpieza y recogida de basuras avanza a buen ritmo». «En Reus somos pioneros, el puerta a puerta comercial funciona bien y es un paso muy importante», añade. Y concreta que «más allá de las herramientas que aportamos, todo el mundo debe poner de su parte para garantizar que la ciudad esté limpia».
Las islas emergentes
El desmantelamiento de las islas de contenedores soterrados del núcleo también se ha compensado con islas emergentes que se instalan cada día a las 19 y se retiran a las 23 horas. Operan en las plazas del Teatre, los Argenters y El Pallol. Al inicio, generaron quejas por las limitaciones de esa franja horaria.
El Ayuntamiento asegura ahora que «han tenido una gran aceptación por parte de la ciudadanía ya que está todo más limpio, no hay olores, hay menos ruido y se ha recuperado espacio público». Pellicer destaca que estas islas «son visitadas por formadores ambientales que realizan esta labor en fechas clave y cuando se detecta algún episodio de incivismo».
«Estamos viviendo una época esplendorosa»
Reus tiene más bares y restaurantes hoy que antes de la irrupción de la Covid. Al menos así se desprende de los datos que refleja el nuevo Observatori Socioeconòmic, presentado por el Ayuntamiento hace pocos días. Según esas estadísticas, a 1 de diciembre de 2022 la cantidad de actividades económicas de este tipo se situaba en 550, mientras que el mismo momento de 2019 se cuantificaban 493 negocios.
Consultado al respecto, el vicepresidente del Gremi de Restauradors de Reus, comenta que «no sé exactamente qué números tenemos en la ciudad, pero quizá en Reus estemos viviendo en una burbuja». En el municipio, tal como indica Perales, el sector «trabaja de una manera que es diferente a la del resto». «Cuando el resto se queja, nosotros solemos estar a tope. Reus está siendo un caso extraño», añade.
La ciudad tiene más bares y comercios ahora que antes de que irrumpiera la pandemia
Quizá por eso, cuenta Perales, «gente de fuera tiene los ojos puestos en Reus» y «propietarios de establecimientos de la costa están buscando negocios aquí para cuando acaba el verano». Por todo ello, «puede ser que sí, que los números del Ayuntamiento sean ciertos», señala, y remarca que «es verdad que hay algunos que van cerrando pero, al mismo tiempo, abren algunos otros».
De cualquier forma, «la sensación es muy buena y podríamos decir que estamos viviendo una época esplendorosa», celebra el vicepresidente del Gremi de Restauradors de Reus.
El mismo Observatori Socioeconòmic aporta también datos de comercios. Para estos –la misma categoría también abarca servicios o talleres mecánicos–, la cifra actual se fija en 1.285, cuando hace tres años se quedaba en 1.137. En su conjunto, las actividades económicas han subido y pasan de 3.639 a 4.241, lo que representa un incremento de 602.
El concejal de Empresa, Carles Prats, señaló la semana pasada que «aunque estamos en un momento complicado, la realidad de Reus no es tan negativa».
