En «Tiempos difíciles», Dickens pone en boca del protagonista estas palabras sobre la clase dirigente: «Tienen que ocuparse de arreglar los problemas, si no, ¿de qué se encargan?». Creo que podrían aplicarse a la situación que vivimos, que perjudica a los más necesitados.
La última encuesta del CEO ofrece datos reveladores del apoyo a la independencia en función del nivel de renta de los catalanes. Quienes cobran menos de 900 euros desean la independencia en un 32% y la rechazan un 59%. En el segmento de 900 a 1.200 euros, la desean un 29% y no la quieren un 66%. Entre 1.200 y 1.800, el 38% contra el 51%. A partir de los que ganan 1.800 euros la tendencia se revierte. Los independentistas ganan por 53% a 40%, cifra que aumenta a 55 contra 37 en quienes ganan más de 2.400 euros.