Las protestas de Hong Kong han hecho escuela. Le Figaro habla del modelo, «hacer un Hong Kong», y dice que se ha extendido desde Chile hasta Catalunya.
En Santiago un grupo de manifestantes logró derribar un dron de la policía con un láser, y en Barcelona miles de personas acudieron a bloquear el aeropuerto, siguiendo el ejemplo de quienes lo hicieron en la antigua colonia británica. Es más, en Hong Kong hubo una manifestación por la «democracia en Catalunya» que reunió a 500 personas según la policía. Estos días TV3 ha dado cumplida cobertura a las elecciones en Hong Kong.
La diferencia es que China es una dictadura y España, una democracia. El presidente Xi Jinping prometió «huesos rotos y cuerpos aplastados» a quienes intenten dividir el país.