No le gustaría a un servidor empezar su andadura en este histórico espacio del Diari sin antes desearle unas felices vacaciones a Antoni Coll y dejar por escrito, de parte de los tres plumillitas durante este mes de agosto, la gran responsabilidad que supone redactar estas líneas. Les cuento un secreto: hay personas que le han manifestado a este redactor que comienzan a leer el Diari por la esquina superior derecha de esta última página.
Una esquina superior derecha que hoy va, como no podría haber sido de otra forma, para Mar Molné. La tiradora morellense se quedó a las puertas de la medalla en los Juegos Olímpicos de París, pero hizo que Tarragona se sintiera orgullosa, pues ejecutó una actuación histórica con tan solo veintidós años y en su primera presencia olímpica.
Lo que está claro es que ya forma parte del presente y futuro del deporte tarraconense. De talento va sobrada.