Las «zapatillas para patriotas» de Trump

En este insólito universo hay muchas cosas que no tienen explicación. Una de ellas es que todo un expresidente de Estados Unidos se ponga a vender zapatillas –aunque, tratándose de Donald Trump, esto es más creíble; de hecho, ya comercia una colonia en un frasco dorado con su cabeza como tapón. ¡Ufff!–. Y aún me cuesta más entender que haya quien se las compre –los mil ejemplares que sacó se agotaron en un santiamén. ¡Dios mío!–. No me cabe en la cabeza. No solo por su precio –cuestan 399 dólares, unos 370 euros–, ni porque la iniciativa surgió apenas unas horas después de que el magnate fuera condenado a pagar 364 millones de dólares por fraude fiscal –se podría interpretar que adquirir estas zapatillas es una forma de darle dinero al pobrecito para pagar sus numerosas multas–. Tampoco por la campaña que habla de que se trata de «zapatillas para verdaderos patriotas» y las publicita como «audaces y duraderas, como el presidente Trump». Ni siquiera por su nombre, «Nunca te rindas». No, no entiendo que alguien las compre, pero mucho menos que haya quien se las ponga por gusto. ¿Las han visto? Son unos tenis altos, de color oro –por lo que cuestan, ya podrían ser de este material– y brillantes, con una bandera estadounidense que envuelve el tobillo, con las suelas rojas a juego con las características corbatas rojas de Trump y con una gran ‘T’ en relieve en el costado y en la lengüeta. Sí, realmente feas. Y, pese a todo esto, hay quien las ha comprado. Incluso durante la presentación, algunos asistentes pudierpn pujar por un par autografiado por el mismísimo Trump. Y uno de ellos –me resisto a calificarle como afortunado– se hizo con un par ¡por 9.000 dólares! Lo dicho, hay misterios insondables en este insólito universo.