Tras un 2020 y un 2021 en que las restricciones a la movilidad impuestas por la Covid-19 provocó que las casas estuvieran habitadas la mayor parte del tiempo y la gente viajara menos, ahora, con la vuelta a la normalidad prepandemia y la posibilidad de ir de vacaciones sin limitaciones, los robos en domicilios se han vuelto a disparar.
Prueba de ello es que si el año pasado y el anterior se registraron una media de 46 robos diarios de viviendas en Catalunya (17.000 en total), este 2022 ya hemos llegado a 60 al día, cerca de los 77 que se alcanzaron en 2019. De hecho, el verano no solo es la temporada alta en cuanto turismo se refiere sino también por el robo de viviendas, aprovechando la ausencia de los propietarios y la baja afluencia de vecinos en los inmuebles.
A los consejos de seguridad tradicionales hay que añadir no publicitar nuestras vacaciones en las redes sociales
Ante este aumento los cuerpos de seguridad nos recuerdan algunos consejos para evitar ponérselo fácil a los ladrones. Algunos son los de toda la vida: cerrar bien todas las puertas y ventanas, no dejar pistas claras de que no hay nadie en el domicilio, dejando alguna persiana un poco subida o encargando a alguien que nos vacíe el buzón.
Además, de no divulgar nuestros planes de entradas y salidas más que a las personas de mayor confianza. Pero hoy las recomendaciones también incluyen lo que publicamos en las redes sociales, uno de los ámbitos donde hoy acostumbramos a inmortalizar y compartir con nuestros conocidos nuestros momentos de ocio y descanso sin pensar en que con ello estamos dando pista sobre desplazamientos y ausencias a los posibles ladrones.
No difundir información sobre nuestras vacaciones o salidas en Internet es hoy uno de los principales consejos de seguridad de nuestros cuerpos policiales y uno de los que menos tenemos interiorizado. Alerta pues. Las redes sociales llegan a muchas personas pero también a los delincuentes.