Un tren de mercancías, algunas de estas peligrosas, descarrilaba este jueves por la mañana en la línea convencional entre Madrid y Zaragoza. En concreto, el suceso se registraba en el municipio de Matillas, en Guadalajara, cuando el convoy estaba a punto de entrar a la estación de dicha localidad.
El tren había salido el miércoles por la tarde desde la estación de mercancías de Constantí y se dirigía a la terminal de mercancías de Abroñigal (en Madrid). En uno de los vagones este transportaba argón líquido refrigerado, una mercancía peligrosa que se utiliza en trabajos de soldadura y que se utiliza tanto en el ámbito de la salud, como en procesos industriales.
Por causas desconocidas, tres de los convoyes del tren, en los que no había mercancías peligrosas, salieron del eje de vías. A causa del incidente se registraron daños en la infraestructura de electrificación.
Según han apuntado varias fuentes, se ha abierto una investigación para conocer las causas de un incidente que no ha provocado heridos.