Los 587 detectores de sustancias tóxicas que prevé el Pla d’Emergència Exterior del Sector Químic de Tarragona (PLASEQTA), ya se encuentran en proceso de instalación. En un inicio, iban a ser 575 sendores, pero, durante el replanteo, se detectó la necesidad de hacer cambios respecto a lo que se había planificado.
Se trata de aparatos que detectarán un total de ocho elementos diferentes y se instalarán en los polígonos Norte y Sur de Tarragona, en el Port, y en los municipios de Constantí, El Morell, Els Pallaresos, Perafort, La Pobla de Mafumet, Tarragona, Vila-seca, La Canonja y Reus. Por otra parte, la directora general de Protecció Civil, Marta Cassany, presentará este viernes la última sirena de riesgo químico prevista en el PLASEQTA.
Las ocho sustancias tóxicas que se detectarán son: el dióxido de azufre, el óxido de etileno, el sulfuro de hidrógeno, el cloro, el amoníaco, el cloruro de hidrógeno, el fosgeno y el acrilonitrilo
Las ocho sustancias tóxicas que se detectarán son: el dióxido de azufre, el óxido de etileno, el sulfuro de hidrógeno, el cloro, el amoníaco, el cloruro de hidrógeno, el fosgeno y el acrilonitrilo. Estas sustancias a medir son las que pueden producir accidentes con nube tóxica que afecte al exterior de las empresas afectadas por la directiva Seveso, relativa al control de los riesgo en accidentes graves en los que intervengan sustancias peligrosas.
En el Polígono Norte de Tarragona, los sensores detectarán tres sustancias tóxicas diferentes (dióxido de azufre, óxido de etileno y sulfuro de hidrógeno) y se colocarán en ubicaciones próximas a las carreteras A-27 y la N-240.
En el Polígono Norte de Tarragona, los aparatos identificarán tres sustancias tóxicas diferentes
En el Polígono Sur y en el Port de Tarragona, los aparatos identificarán siete sustancias diferentes: dióxido de azufre, cloro, amoníaco, óxido de etileno, cloruro de hidrógeno, fosgeno y acrilonitrilo.
Los sensores se instalarán en diferentes apoyos como farolas de alumbrado, torres eléctricas, palos de hormigón de torres de electricidad, paredes de edificios o palos de madera de cableado eléctrico.
En el Polígono Sur y en el Port de Tarragona, los sensores que detectarán siete sustancias diferentes
En una misma ubicación se podrá instalar más de un sensor, en función de los productos químicos que sea necesario detectar en aquella zona. Además, los sensores tendrán que ir montados dentro de un encapsulado con protección a la intemperie, e incorporar un sistema de alimentación autónoma; un sistema de apoyo y anclaje; y equipaciones de comunicaciones y transmisión de datos.
Protecció Civil ha hecho un trabajo de análisis técnico que ha permitido confirmar la viabilidad del proyecto, dado que es la primera red de estas características.