El Ayuntamiento de Tarragona ha puesto en servicio este miércoles la ampliación del parking de Torroja. Son 185 nuevas plazas que hacen que el aparcamiento llegue a 325, en una actuación que ha costado casi 1,8 millones de euros y que ha sido financiada con los fondos Next Generation.
Entre la oferta también se encuentran diez plazas para vehículos eléctricos y siete para automóviles de personas con movilidad reducida, El alcalde de la ciudad, Rubén Viñuales, ha afirmado que la ampliación permitirá mejorar la movilidad en la Part Alta y reducir el número de coches que entra en el casco antiguo.
A su vez, permitirá garantizar aparcamiento en la zona cuando entre en funcionamiento la Zona de Bajas Emisiones en 2025.
Viñuales apuntó que el objetivo final es la «movilidad sostenible» y que esta ampliación ayudará a este hecho.
«La ampliación es una pieza importante de un engranaje que nos debe llevar a una ciudad más cómoda, amable, sostenible y que en el camino garantice la movilidad y desarrollo económico de los tarraconenses, y que no pierda de vista a aquellas personas que menos tienen», indicó. El coste máximo diario por estacionar el vehículo será de 5,95 euros.
Paralelamente, ha apuntado que están buscando opciones para que el fallido parking Jaume I acabe siendo, finalmente, un aparcamiento.
Viñuales ha comentado que adaptar la obra costaría «más de 2 millones», sin entrar a hacer una valoración esmerada, pero que la voluntad del equipo de gobierno es que esté destinado principalmente a los vecinos de la Part Alta.
Además, avanzó que continúan con conversaciones con el Arquebisbat de Tarragona para poder destinar los terrenos del antiguo campo de fútbol del Roqueral -al lado de la muralla- a un aparcamiento.