Tarragona exige recuperar los trenes nocturnos

Mientras en Europa muchos países están apostando por el ferrocarril en sustitución del avión, en España los últimos convoyes que quedaron desaparecieron con la pandemia y no se han restablecido

10 julio 2023 20:02 | Actualizado a 11 julio 2023 07:00
Se lee en minutos
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

Salamanca, A Coruña, la cornisa cantábrica, Sevilla, Córdoba, Málaga, Cartagena y Portbou son algunas de las destinaciones a las que podía viajarse en el tren nocturno desde Tarragona. Muchos de estos servicios dejaron de operar a partir del año 2010, cuando se hizo la apuesta por el tren de alta velocidad, desapareciendo el último en el año 2020. Este enlazaba Barcelona con Galicia vía Tarragona, dejando de funcionar temporalmente cuando se impusieron las restricciones de movilidad por la pandemia.

«Los eliminaron temporalmente y no han vuelto a ponerlos. De hecho, muchos de los trenes hotel que quedaban se transformaron en vagones de alta velocidad», argumenta el portavoz de la plataforma per a la Promoció del Transport Públic (PTP) en las comarcas tarraconenses, Daniel Pi. Junto con la conexión Barcelona-A Coruña también dejaron de operar las frecuencias Lisboa-Madrid y Madrid-Galicia, dejando España huérfana de un servicio que cada vez más voces piden que se restablezca, siguiendo la dinámica de lo que está pasando desde hace algún tiempo en el resto de estados europeos.

La emergencia climática y la búsqueda de alternativas más sostenibles para desplazarse hace que ahora mismo en Europa se viva un momento «en expansión», en cuanto a la recuperación de los trenes nocturnos. La prohibición francesa del avión, cuando hay una alternativa en tren, así como el auge de empresas que vuelven a proponer rutas nocturnas ha hecho que de nueva vuelva a resurgir este debate. En parte, se está potenciando desde las asociaciones de usuarios del transporte público y en favor de una movilidad más sostenible, que han iniciado una fuerte presión para que el gobierno español que surja de las elecciones del próximo 23-J incluya los trenes nocturnos dentro de la estrategia de movilidad sostenible del país.

«Aquí no hay ninguna voluntad de recuperar estos servicios por parte de Renfe», argumenta Pi. Lo atribuye a la «visión peninsular» de la compañía, teniendo en cuenta que «son conexiones que tienen sentido cuando se hacen de periferia a periferia, y por tanto, estamos hablando de un desplazamiento largo». Por contra, el modelo que se priorizó desde Madrid hace referencia a la conexión de la capital del Estado en alta velocidad con cada una de las capitales de provincia españolas, reforzando el modelo radial.

Una hora de viaje

Los defensores de los trenes nocturnos aseguran que una de las principales ventajas es que «el viaje dura una hora». A los treinta minutos que uno puede tardar desde que sube al tren y se pone cómodo para dormir hay que sumarle otra media hora por la mañana, cuando se despierta ya en la estación de destino. «Prácticamente estamos hablando de la misma comodidad que en una habitación de hotel», argumenta Pi.

Los trenes nocturnos habitualmente tienen más demanda en ciudades donde el aeropuerto queda lejos y, por tanto, hay que desplazarse. A la suma de tiempo que esto comporta hay que añadirle que en Europa se está registrando un «fenómeno creciente», sobre todo entre los más jóvenes, que «sienten vergüenza a la hora de volar, por el impacto ambiental que esto comporta», afirma Pi. El objetivo es claro: reducir los pasajeros del avión, disminuyendo en un 20% las emisiones de dióxido de carbono.

Los servicios nocturnos son «ideales» para los desplazamientos entre 800 y 1.500 kilómetros, por lo que el tren se presenta como una alternativa al avión en los trayectos que se hacen al interior de la Península. Francia y el norte de Italia también estarían dentro de este radio en el que también se incluiría la zona más próxima de Alemania e incluso Londres.

El operador austríaco ÖBB fue el primero en lanzar esta apuesta, para conectar con las capitales de sus países vecinos. Posteriormente, se sumó la CFF (suiza) y DB (Alemania). «Les salen los números y se están recuperando conexiones, de lo contrario no pasaría», defiende Pi. Más allá de los grandes operadores, hay surgido compañías de nueva creación que apuestan por recorridos nocturnos por Europa, como los European Sleeper o los Midnight Trains, que ya tienen en el punto de mira a Barcelona.

Pi lamenta que «España irá retrasada respecto a la Unión Europea, donde los trenes nocturnos ya son una realidad». Y aquí, los principales inconvenientes que señala son dos. Por un lado, que «tenemos un operador nacional que no cree en ello». Y, por el otro, que «en los viajes internacionales siempre estamos obligados a pasar por Francia y SNFC es muy proteccionista, con barreras de entrada». Para ello, considera indispensable que las instituciones europeas deberán intervenir «más pronto que tarde».

Hace unos días Ecologistes en Acció hacía una convocatoria delante de la sede del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma), en la que invitaba a los asistentes a acudir en pijama por la recuperación de estos servicios.

El portavoz de esta entidad, Pablo Muñoz, lamenta que España se está convirtiendo en una «anomalía» dentro de los países europeos, teniendo en cuenta que «tiene una superficie ideal para plantearnos la sustitución de los vuelos de menos de cuatro horas por trenes». Los defensores denuncian que el ferrocarril juega con una posición de desventaja respecto al transporte aéreo. «Hay un conjunto de bonificaciones y subvenciones encubiertas, para potenciar nuevas rutas aéreas, que en el caso del tren no se dan», afirma Muñoz.

Pese a ello, los precios que podían ofrecer hace unos años las compañías aéreas low-cost nada tienen que ver con la actualidad. Lo estamos viendo este verano, cuando viajar en avión se ha convertido en uno de los principales gastos para las personas que quieren irse de vacaciones. Por contra, el transporte aéreo dispone de un sistema mucho más sencillo y accesible en cuanto a la venta de billetes, información sobre conexiones, horarios, etc. El tren todavía no ha llegado a este escenario, por lo que, muy a menudo, los usuarios tienen que buscarse la vida en la página web de cada una de las compañías.

Asimismo, para que muchos de los desplazamientos puedan hacerse en tren, con unos horarios competitivos, se espera que puedan potenciarse los servicios directos, reduciendo las paradas intermedias. Con todo, las entidades que defienden la recuperación de estos servicios argumentan que el fenómeno de los trenes nocturnos ha superado la barrera del romanticismo para llegar a nuevos públicos, que antes no lo contemplaban.

Comentarios
Multimedia Diari